Música, máscaras y atuendos
1. La guitarra es uno de los instrumentos más representativos de la fiesta del carnaval. La gente, incluso, puede tocar ciertos aparatos mientras visita el lugar. 2. La vestimenta de la Ñusta, la más barata, está valorada en $ 263. Es uno de los trajes típicos de la celebración del carnaval en Guaranda.
EXHIBICIÓN
calde de Guaranda, Ramsés Torres, levantó la infraestructura -conocida también como el museo de la guitarra por su forma, que incluso se puede ver a través del Google Earth- y la llenó de historia y color. Así, en la entrada se observa ahora una conocidísima copla que se ha expandido no solo en aquel poblado, sino en todo el Ecuador: “Al golpe del carnaval, todo el mundo se levanta, qué bonito es carnaval”. Pero esta no es solo “una fiesta de shows artísticos, sino de tradición”, agrega Patricia, quien invita a recorrer el sitio asentado en la provincia del centro del Ecuador, donde la temperatura oscila entre los 8 y 25 grados centígrados. En el primer piso se exponen ilustraciones como la del Fauno, el dios de la agricultura y el pastoreo, sosteniendo la máscara de Zeus.
De las paredes brota la historia: “Según la creencia religiosa, el carnaval era una fiesta pagana”. Por eso estaba tan mal visto; desde el siglo XV ya se prohibía esta fiesta en el Ecuador, se multaba con 4 pesos y 15 días de cárcel al que se atreviera a jugar en la calle. “En 1755 se creía que con las personas que jugaban ocurrían grandes catástrofes, como el terremoto de Píllaro”, cuenta la guía.
Pero el carnaval no es una fiesta netamente latinoamericana, tiene influencia española. En Guaranda la cultura europea se fundió con la indígena, así fue pasando de generación en generación.
Son características las grandes carrozas, con el taita carnaval a la cabeza y el tradicional Pájaro Azul, un trago que al menos en los días de la celebración -generalmente en febrero- se consume en las casas del cantón. Todo al compás del saxofón, clarinete, trombón y guitarra.
‘A la voz del carnaval’ fue grabada por las hermanas Marín Carvajal en 1932, es típica y se escucha hasta hoy. Después, esa misma canción fue adaptada a diferentes ritmos y melodías, como lo hicieron los hermanos González con un grupo guarandeño.
Y dice: “El carnaval de Guaranda nadie lo puede imitar, porque solamente un guarandeño puede cantar y bailar”.