La gallina criolla, un alimento esencial en la cocina montuvia
Con esta ave se preparan secos, caldos, tongas y otras recetas del campo ❚ Mujeres campesinas cuentan cuál es el secreto de su sabor y otros detalles
EL DETALLE Gastronomía. Más de 80 gallinas se ‘saborearon en el festival realizado en la parroquia Monterrey, al que acudieron más de veinte mil visitantes. EXPOSICIÓN
El sabor de la gallina de campo no se iguala al de las que son criadas con balanceado en granjas, opina Zoila Méndez, quien se autodefine como una “orgullosa montuvia”, originaria de Mocache, provincia de Los Ríos, y que actualmente radica en la parroquia Monterrey, de La Concordia, perteneciente a Santo Domingo de los Tsáchilas.
Desde que era niña, Méndez veía a sus familiares preparar todo tipo de platos con estas aves. De esta forma aprendió a cocinar los deliciosos platos que se elaboran en el campo.
La gallina criolla da a las comidas un gusto especial, sabroso y muy diferente a los platillos elaborados con pollo de granja, insiste la mujer. Lo atribuye al hecho de que se trata de gallinas alimentadas de forma natural y sin hormonas, “por lo cual son más saludables”.
Para esta cocinera, preparar y comer secos y caldos de gallina es parte de la tradición montuvia. Por ello se ha empeñado en compartir sus conocimientos con sus hijos para que no pierdan la sazón.
Leonela Monserrate, de 28 años, es una de ellos y sigue todas sus recetas al pie de la letra. La joven dice que gracias a las enseñanzas de su progenitora puede llevar a su mesa platos tradicionales del pueblo montuvio, y que al igual que sus ancestros, ella pretende pasar esa tradición culinaria a sus hijas.
“A una de ellas sí le gusta la cocina y nuestras tradiciones, pero la otra está más pendiente de la televisión y el celular”, explicó Monserrate.
Cuenta que en su infancia jugaba todo el día con familiares y vecinos, otra costumbre propia de la gente del campo.
Alba Zambrano es otra mujer del campo para quien preparar una gallina no es lo único típico de los montuvios. Lo es también el demostrar cariño y hospitalidad a los visitantes, a quienes siempre se le ofrece este alimento como una muestra de bienvenida.
Los manjares hechos con el ave se ofrecen en el plato principal en las reuniones familiares y festividades. “En cumpleaños, velorios, Navidad, fin de año y todas las fiestas, no falta la gallina criolla”, detalló.
Aparte de ser la preferida por su buen sabor, la gallina une a la familia. Al menos así lo cree Zambrano, quien señala que cuando el plato está presente en la mesa, durante su degustación los comensales comparten y conversan.