El trueque, un medio para distribuir las semillas
Con un festival buscan concienciar sobre la gastronomía ancestral
“Sembremos los campos y florecerán las ciudades”, es el lema bajo el cual se organizó el II Festival de las Semillas, realizado en Riobamba.
Para los pueblos originarios, las semillas eran la base de su existencia, toda su forma de ver el mundo gira en torno a la chacra y su interrelación; pero con la llegada de la modernidad, muchas semillas de alimentos ancestrales se han perdido.
Escuela Superior Politécnica de Chimborazo, la Estatal Amazónica, el Ministerio de Agricultura, Agricultura, y el Fepp, el evento buscaba concienciar a la ciudadanía de la necesidad de retornar a la agricultura ancestral, al no uso de transgénicos y sobre todo dar valor a los productos que cosechan los agricultores de los diferentes pueblos.
El festival se llevó a cabo durante dos días en los cuales se abordaron temas como la soberanía alimentaria, transgénicos y el impacto sobre la salud y la importancia de los sistemas forestales, con la presencia de 300 asistentes de diferentes comunidades.
Durante la feria de exhibición de las semillas en el parque Guayaquil, en varios stands se mostraron diferentes variedades de semillas (algunas prácticamente a punto de desaparecer), así como productos innovadores que se elaboran a partir de estas, además de formas orgánicas de cultivo.
No faltaron las demostraciones para los más jóvenes de cómo se siembra el maíz en la chacra y la técnica que utilizaban los abuelos para desgranarlo.
Andrea Guapi, técnica docente de la Espoch, y sus alumnos recopilaron más de 150 clases de diferentes semillas: mashuas amarillas, blancas, ocas blancas y rojas, diferentes clases de fréjoles propios de la zona de Chimborazo y que ya casi nadie los conoce. Además recuperaron las habillas, leguminosa propia de los puruhaes. “Esta se sembraba en las partes secas, se la utilizaba tanto tierna como seca, pero se ha perdido”, dijo. Destacó que la recuperación de estas semillas, sumado al empleo de una agricultura orgánica sin químicos, aporta muchísimo a disminuir dos de las enfermedades que se presentan en la actualidad, como la desnutrición y la obesidad, por ser rica en proteína y baja en grasa.
LA FRASE Somos lo que comemos. Tenemos un país megadiverso con semillas que debemos cuidar