Sí pudieron entrar al Capwell
Más de un centenar de aficionados albos, que residen en Guayaquil, pudieron ingresar al estadio de Emelec la tarde de ayer tras una gestión de Liga de Quito.
HINCHADA VISITANTE
y Jhojan Julio, hermanos que complicaron desde el inicio a la defensa eléctrica.
Liga fue mejor al arranque, durante un lapso en el que Emelec no encontró la posesión del balón y se le complicaban las transiciones de defensa a ataque.
Los pases largos y los centros al corazón del área fueron su vía de escape, misma que pudo haberles favorecido en varias oportunidades. La primera llegó al minuto 14, cuando Juan Carlos Paredes lanzó un centro desde el costado derecho que Brayan Angulo conectó de volea, pero Adrián Gabbarini manoteó para evitar la anotación.
Emelec erró mucho en mitad
Ya en el complemento, los millonarios tomaron el control del encuentro, pero no de la manera suficiente como para romper el 0-0. Sus incansables intentos sucumbieron ante la muralla blanca que supo mantenerse firme. Y que, con algo más de eficacia, hubiese podido liquidar el duelo en uno de los contragolpes que generó y no supo aprovechar.
Al final, el Bombillo anticipó el grito de gol, luego de un cobro de tiro libre ejecutado por Pedro Quiñónez, cuando su cobro pegó en las mallas laterales del arco defendido por Gabbarini.
Ahora, Emelec tendrá que esperar seis últimos días para definir, de una vez por todas, su posible estadía en la final del campeonato ecuatoriano, donde tendrían que medir nuevamente a Liga de Quito, equipo al que no han vencido en todo el 2018.