Bustos, el líder de un exitoso proyecto
El técnico argentino campeón con el Delfín puso las bases hace dos años de un cuadro que logró el primer cetro para Manabí
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AÑOS son los que suma el estratega argentino, flamante campeón nacional, dirigiendo a equipos ecuatorianos.
El título conseguido por Delfín tiene un actor principal. Se trata de Fabián Bustos, no solo porque es su entrenador, sino que además es un constante planificador en todos los aspectos, desde el plano táctico estudiando debilidades y fortalezas de sus rivales, lo que le permite explotar al máximo las virtudes de sus dirigidos.
Así es como sus equipos en realidad son conjuntos que expresan una clara idea futbolística dentro del campo, lo que no quiere decir que no es abierto al cambio. Sabe interpretar los partidos de una manera eficaz y se ajusta a la necesidad. Así lo hizo en la final de ida ante Liga de Quito, cuando obtuvo la mitad de la estrella que levantó ayer con Delfín, el primer campeón manabita en la historia de la Serie A.
El Cetáceo ha sido como un hogar para el Toro, como se conoce al argentino desde su época de jugador. Un título en la Serie B daba señas de que su nombre estaría ligado al éxito en el cuadro que con el tiempo se ha ganado la admiración dentro del balompié ecuatoriano.
Precisamente Bustos formó parte del Delfín que le permitió a Manabí gozar por primera vez de una Copa Libertadores de América tras la campaña del 2017, cuando alcanzó el boleto a la final del torneo nacional que fue ganado por Emelec.
Si bien el técnico de esa campaña fue el uruguayo Guillermo Sanguinetti, Bustos lideró ese proyecto como gerente deportivo, no solo gestionando su contratación para el banquillo, sino también trayendo los refuerzos para el cuadro que logró el vicecampeonato nacional, algo impensable para muchos a inicios de la temporada, menos para él.
Tras la salida del charrúa, Bustos tomó la dirección técnica del Cetáceo y repitió clasificación a la Libertadores por segundo año consecutivo.
El 2020 será el tercer año seguido que el Delfín estará en el máximo evento continental a nivel de clubes, pero esta vez como campeón ecuatoriano. Lo que parecía un sueño se hizo realidad con las bases, el proceso y la consolidación total del equipo dirigido por Bustos.