DESORDEN EN LA COMPRA DE MEDICINAS
ADQUISICIONES El gasto se elevó el año pasado a $ 300 millones.
El reclamo no es nuevo. Las compras en Salud que hace el Estado generan críticas por el desorden de los compradores (las casas de salud) pero también por la falta de recursos que debe entregar el Gobierno. Solo en el año pasado, las entidades a cargo del sistema médico público firmaron contratos por 292,9 millones de dólares por medicamentos. De ese monto, la mayoría fue a hospitales y centros del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS). Un dato que llama la atención porque es precisamente esa entidad la que acumula más irregularidades en sus bodegas.
Durante 2019, las entidades de la seguridad social hicieron compras por 155,5 millones de dólares solo para medicinas. El 53,1 % de todas las adquisiciones
de fármacos que hizo el Ecuador.
Entre los principales compradores del IESS está el Hospital del Norte de Los Ceibos. Ese es uno de los que más casos de infectados por COVID19 alberga en el país.
Tal como describió ayer EXPRESO, el Hospital de Los Ceibos hace sus propias compras por un fallo en el sistema
de contratación pública. En lugar de que exista un solo ente que haga la compra de medicinas para el Estado, cada casa de salud decide qué y cuánto comprar. Esa libertad genera desorden, sobreprecios y actos de corrupción.
En segundo lugar de la contratación de fármacos está el conjunto de centros médicos y hospitales que están bajo el Ministerio
de Salud Pública. Ahí están entes como el Hospital del Guasmo Sur que concentra, como el de Los Ceibos, una abultada porción de los casos de coronavirus.
El vicepresidente Otto Sonnenholzner precisó, en entrevista con Andrés Carrión, el domingo, que las dos casas de salud tienen el fuerte de casos de la pandemia que originó la emergencia sanitaria y el aislamiento domiciliario.
En total, los hospitales que responden al ministerio hicieron compras por más de 134,3 millones de dólares, el año pasado.
Es decir, el IESS y el Ministerio de Salud tienen el 99 % de toda la compra pública. Sin embargo, no son los únicos que brindan atención médica. Los gobiernos autónomos descentralizados, las universidades y hasta algunas empresas públicas dan servicios de salud para la ciudadanía, pero su participación en la compra pública no supera el 1 %.
EXPRESO conoció que las autoridades gubernamentales trabajan en un nuevo esquema de compra pública de medicinas que, según sus impulsores, garantice el mejor precio, transparencia y una adecuada repartición de fármacos.