El peso agrava la dura economía de los argentinos
Por la devaluación, los bancos llevan cuatro días sin vender dólares
Eenésima l peso argentino vive su situación angustiosa. El “supercepo” establecido la semana pasada sobre el mercado cambiario ha frenado la sangría de divisas que sufría el Banco Central, pero ha agravado la ansiedad de empresarios, ahorradores y especuladores. El dólar blue (o libre, o ilegal, según quien lo defina) supera los 140 pesos, frente a los 130 de principio de este mes o, puestos en comparaciones, los 37 pesos de hace dos años.
El cambio oficial, al que deben atenerse importadores y exportadores, está en 75 pesos. La diferencia entre lo oficial y lo real se agranda día a día. Los bancos llevan cuatro días sin vender dólares.
Los ciudadanos argentinos pueden adquirir mensualmente hasta 200 dólares. Pero el ansia compradora (la adquisición de dólares es la mejor forma de proteger los ahorros frente a la inflación, o de ganar un pequeño sobresueldo pagando dólares al precio oficial y revendiéndolos clandestinamente al precio real) estaba dejando el país sin reservas. Desde el 16 de septiembre, al impuesto del 30 % sobre la compraventa, se sumó otro recargo del 35 %.
Una de las condiciones que el gobierno de Alberto Fernández estableció la semana pasada fue que los perceptores de subsidios estatales no tendrían derecho a adquirir los 200 dólares mensuales. Y ese es el problema que padecen ahora los bancos: dicen que les supone demasiado tiempo comprobar si un cliente cobra o no un subsidio y, por tanto, han interrumpido ventas. Nadie sabe cuándo se reanudarán.
Acuerdo. El ministro de Economía de Argentina, Martín Guzmán.