El gran negocio mundial del placer femenino
Una nueva generación de juguetes sexuales, más versátiles y elegantes para mujeres llega al mercado y dispara las ventas por todo el mundo
A la proliferación de nuevos juguetes se sumó el tiempo de cuarentena para un nicho millonario.
de bienestar sexual más vendido en el mundo. En 2019 comercializó dos millones de estos succionadores. En 2020 fueron cuatro millones. “La crisis del coronavirus trajo un gran aumento en el número de pedidos y fuimos capaces de aumentar la producción a 45.000 unidades del Pro 2 al día”, señala Barz. Antes de la pandemia, el ritmo estaba en torno a 20.000.
Tras el éxito de este pequeño juguete hecho de silicona suave está un hombre, André Geske, empresario alemán. En 2016 creó Satisfyer como marca internacional de juguetes sexuales. Distribuye sus productos a más de 100 países y sus mercados principales son Alemania, Estados Unidos, Australia y Japón. La empresa no concreta la cifra de facturación, pero dice que “superará de lejos los 150 millones en 2020”.
Esta es la versión más económica del succionador de clítoris, pero no es el único del mercado, ni tampoco fue el primero. En 2014, y tras dos años de estudios, el inventor alemán Michael Lenke lanzó el Womanizer. Este aparato funciona a través de la tecnología patentada Pleasure Air, que genera ondas de aire que succionan las terminaciones nerviosas del clítoris. Se convertía en la primera innovación en el campo del placer femenino en los últimos 100 años.
En 2017, el empresario alemán Johannes Plettenberg compró la marca a Lenke y un año después fundó WOW Tech Group, tras adquirir también la firma de juguetes sexuales para parejas Wevibe. Así, reunió a dos de las marcas de lujo más vendidas del mundo. En 2020 sus ingresos globales crecieron hasta lograr una caja de 100 millones de euros, frente a los 75 millones de 2019.
LELO es otra de las marcas presente en la mesilla de noche de millones de mujeres. Aunque fueron tres hombres quienes fundaron la compañía en Estocolmo en 2003. Filip Sedic (ingeniero), Eric Kalen y Carl Magnusson (diseñadores de producto) se dieron cuenta, tras comprar un dispositivo erótico para una amiga, de que los diseños y materiales podían mejorar.
Los succionadores de clítoris de la marca, llamados SONA, tuvieron un desarrollo de dos años. Su éxito está en que su tecnología de ondas sónicas estimula tanto la parte externa del clítoris como la interna. El número de unidades vendidas en España creció un 299 % en 2019, siendo el país europeo con mayor demanda, seguido de Francia, Reino Unido, Holanda y Alemania.
MARCAS
Desde el lanzamiento de Womanizer en 2014, se han vendido más de tres millones de unidades.
Sus precios varían entre 69 (83 dólares) hasta 189 euros (229 dólares).