La Fiscalía recibe versiones por posibles anomalías en compra de terrenos del Isspol
Se denunció aparente sobreprecio en la compra de tres predios
Desde ayer y hasta la próxima semana, al menos ocho personas rendirán versión en la Fiscalía por las posibles irregularidades en el caso de bienes improductivos comprados con aparente sobreprecio en el Instituto de Seguridad Social de la Policía (Isspol). Los directivos han presentado denuncias por posibles anomalías en inversiones, compra de bienes y otros temas.
En el caso de los bienes improductivos, ayer dio su versión Jorge Villarroel, exdirector del Isspol. Él pidió que se investiguen las presuntas anomalías y se determine a sus autores.
Villarroel señaló que se trata de tres bienes: Mapreco y Ambiensa (en Guayas) y Anchamaza (en Uyumbicho, Pichincha). La presunción es que se adquirieron con sobreprecio.
“Los que realizaron la inspección, los técnicos, el asesor legal, encuentran que existen algunas irregularidades. Y el Consejo Directivo lo que ha hecho, en conocimiento de esas irregularidades, es disponer que se denuncie a la Fiscalía”, indicó. En el proceso intervinieron algunas instancias. Por eso se llamó a exfuncionarios de la Comisión de Inversiones, de las direcciones de Riesgos, la Económica, entre otras áreas.
En la gestión del exdirector del Isspol Enrique Espinosa de los Monteros se habrían efectuado esas compras entre 2012 y 2015. El exfuncionario fue llamado a dar su versión ayer y estuvo con su abogado Paúl Ocaña.
Entre 2013 y 2015 el Isspol participó en la compra de terrenos que pasaron a ser improductivos. En Anchamaza el avalúo catastral habría sido de $ 500.000 y el último avalúo comercial de $ 4,5 millones. Sin embargo, en 2015 se pagó por él $ 14,8 millones con el argumento de que se acompañó en la propuesta la aprobación de un proyecto inmobiliario.
En el sector de Chongón, en Guayas, están los predios que pertenecían a la empresa Ambiensa, adquiridos en $ 17 millones, cuando el avalúo catastral era de $ 900.000. Por los terrenos pasa un gasoducto que impide la realización de cualquier proyecto. En Petrillo, cantón Nobol de Guayas, se adquirió por $ 3,1 millones otro bien a la empresa Mapreco. Los terrenos con galpones, después de varios años, tuvieron un valor catastral que no supera los $ 800.000.
Ocaña manifestó que se demostrará que no existen los presuntos sobreprecios de los que se habla en las denuncias. Para él, no hay peculado porque no son dineros públicos. Lo habrían certificado la Procuraduría y la Contraloría. La otra razón es que “para adquirir los terrenos se hacen avalúos calificados por las superintendencias de Bancos y Compañías y ellos dan los valores reales; lo que están indicando es el costo del Municipio y ese tiene mucha diferencia con el valor comercial”.
LA CIFRA
700 MILLONES
de dólares en inversiones del Isspol se consideran de riesgo.