Quejas contra el IESS por mora en los aportes
PENDIENTES. La Seguridad Social consta entre los patronos incumplidos
La Seguridad Social debe aportes a la Seguridad Social. El Observatorio de este ente en Guayas calcula que hay en torno a 100.000 dólares de aportes patronales pendientes y decenas de quejas de trabajadores de hospital Teodoro Maldonado del IESS que no han podido acceder a préstamos y otros beneficios por la mora de su patrono, pese a que aseguran que sí se les están haciendo los descuentos correspondientes a ese rubro. Esta irregularidad, tipificada como delito, fue notificada por el Observatorio en un oficio del 2 de febrero que no ha recibido respuesta.
EL DATO
Entrevista. EXPRESO ha solicitado respuestas al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social, pero no se ha recibido una explicación sobre la mora patronal.
Lady (nombre protegido) lleva desde septiembre del año pasado intentando obtener una novación o un préstamo quirografario que la saque de apuros. Con urgencia, busca obtener un crédito de $ 800 que le permita cubrir parte de una deuda que obtuvo hace más de un año por una prestación médica. No obstante, dice, el trámite ha sido imposible: el sistema le informa que el propio IESS, el ente regulador de los afiliados y sus pagos, dueño del hospital Teodoro Maldonado Carbo donde hoy trabaja, se mantiene en mora patronal.
No ha podido obtener el beneficio pese a que ella sostiene que mes a mes de su rol le descuentan $ 60,34 por las aportaciones que ella debe hacer al Instituto de Seguridad Social. “Es decir, a nosotros sí nos descuentan, pero claramente se ve que no están pagando las planillas”, dice.
No es el único reclamo. Decenas de quejas provienen de ese mismo hospital que acoge a 2.970 trabajadores y cuyos casos hoy se receptan en el Observatorio de la Seguridad Social del Guayas. “Es totalmente absurdo que la misma entidad que está encargada de vigilar las aportaciones a la Seguridad Social sea la primera que esté en mora”, dice Manuel Defas, coordinador provincial de dicho organismo.
Este Diario lleva desde el martes pasado esperando una entrevista con Carlos Luis Tamayo, director nacional del Instituto Ecuatoriano
de Seguridad Social (IESS), para abordar este y otros temas. Aunque se comprometió a atendernos, eso no sucedió hasta el cierre de esta edición.
Las autoridades tampoco han contestado el oficio que el Observatorio remitió al Instituto el
pasado 2 de febrero, en el que pide explicaciones por esta mora patronal que, según Defas y cálculos de primera instancia, se acerca a los $ 100.000. La irregularidad, advierte, constituye un delito penal, “pues no se han estado pagando los aportes del empleador
y los aportes individuales que ya han venido captando”. Esto ha provocado que los servidores no puedan realizar préstamos y que la misma Seguridad Social tenga que acumular nuevas deudas, por multas.
“Si un empleado tiene la necesidad de una cirugía urgente que cuesta unos $ 2.000, hay que cobrarle al hospital esa suma, pero más el 50 % de multa (por estar en mora). Es decir, $ 1.000 adicionales, dinero que supuestamente también tiene que ser pagado por el IESS”.
Si a su empleado le descuenta y no paga la aportación, es un delito penal.
MANUEL DEFAS, director del Observatorio IESS
La situación preocupa, dice Defas. El organismo ahora mismo lleva a cabo una investigación para ver si la situación se repite con otras entidades. En enero pasado, el Observatorio también denunció un inconveniente parecido. “Aparentemente el IESS estaba al día en sus aportaciones, pero el Biess no registraba eso porque supuestamente la migración de datos no estaba al día”, situación que también impidió que ciertos afiliados puedan tramitar préstamos.
Este problema se da en un contexto de apretada liquidez de la entidad, producto de los impagos estatales y de los efectos de la pandemia, que en una ola de desempleo hizo que el año pasado lo cerrara con más de 200.000 desafiados.
En una entrevista dada a este Diario, Carlos Torres, director de Afiliación del IESS, indicó que entre las medidas que se están adoptando para equilibrar esos ingresos está el reforzar las inspecciones para detectar la desafiliación o la evasión en el pago de aportes. Sobre lo primero, la meta, hasta fines de este año, es poder regularizar a 40.000 trabajadores que hoy no están asegurados.
LA FRASE