Se va a victimizar
La Revista Semana de Colombia reveló la existencia de miles de archivos de un miembro del ELN, alias Uriel, según los cuales habría existido un préstamo a cierto candidato a la presidencia.
En ningún momento la sociedad ecuatoriana ha llegado al extremo de percibir con beneplácito la incursión de narcoguerrilleros como las FARC o el ELN en su vida social o política. Peor permitir que sus dineros ilícitos sean introducidos al país para el financiamiento de las campañas electorales.
Es preciso recordar que la colectividad se vio conmocionada cuándo las FARC secuestraron y segaron la vida de tres periodistas de Diario El Comercio.
Pese a tener constitucionalmente asignadas las competencias de control sobre el financiamiento y la legalidad de las campañas electorales en el art. 219 de la Constitución, la inacción del Consejo Nacional Electoral en esta materia ha sido pasmosa. Para colmo, en uno de los mayores actos de corrupción del anterior régimen, nos engañaron aprobando una nueva ley penal de mil artículos para camuflar la desaparición de este peligroso delito. Así, la Fiscalía no tiene la herramienta legal para perseguirlo. Hay que dársela y rápido. Al margen de si hay o no segunda vuelta, el país debe recuperar la decencia. No podemos seguir siendo la guarida de guerrilleros o de sus sangrientos dineros.
Y como nadie lo hace, he redactado el proyecto de ley para restablecer los delitos de comprar votos y usar dineros ilícitos en las campañas. Tal cual habían estado vigentes desde hace más de medio siglo.
Así pierde el derecho de ser elegido quien hubiere cometido estos delitos. Y así quien lo haga, no podrá participar en la segunda vuelta. -Lo vas a crecer. - No. Ya está crecido. -Se va a victimizar. -No. Las víctimas somos nosotros. Si no, pregúntenle a la familia de Efraín.
El proyecto ya está en la Asamblea. Depende de nosotros, prensa, sociedad civil y la gente decente de este país, que aún es mucha, el presionar la aprobación de esta sencilla ley de 2 artículos. Así la Fiscalía podrá pedir la información a Colombia para meter presos a los culpables.