“El hospital tiene como un área 51 y solo falta el marciano”
IESS. El gerente del Teodoro Maldonado es tajante: hay más urgencias que insumos
El paciente con peor pronóstico del sistema de salud ecuatoriano son hoy los hospitales. El Teodoro Maldonado, del Instituto Ecuatoriano de la Seguridad Social, tiene más necesidades por resolver de forma urgente que insumos. Y no le falta presupuesto, sino usarlo eficiente y con rectitud. Lo dice su gerente general, que, por experiencia propia, sabe lo que es perder a un familiar en esas instalaciones. De los 800 ítems (medicamentos y material médico) que requiere, no hay ni la mitad, incluyendo entre los faltantes el oxígeno, los analgésicos o simples agujas. Lo que no faltan, por otro lado, son facturas impagas a proveedores.
EL DATO
Medicamentos. Con compras de ínfima cuantía, la nueva autoridad aspira a paliar en 30 días la falta de medicinas. “No más de 90 días”, asume.
La Dirección del Parque Nacional Galápagos (DPNG) anunció el cierre de la pesquería del pepino de mar, toda vez que se ha superado la cuota de captura permitida para esta temporada.
“Los monitoreos diurnos y nocturnos de pepino de mar, en los muelles autorizados de los puertos poblados, confirman que se cumplió con la cuota de 600.000 individuos, establecida por la autoridad ambiental”, informó la DPNG.
Por ello, notificó inmediatamente de la veda a las cooperativas de pesca artesanal de Galápagos y a los puntos de control remotos de la DPNG, instalados en los sitios de pesca.
En las nuevas circunstancias, “los pescadores que se encuentran en faena lejos de los puertos poblados tienen dos días para regresar y monitorear la pesca capturada”, señala la DPNG.
“Posteriormente se habilitan ocho días para la comercialización y salida del producto que se encuentre dentro del archipiélago”, agrega.
La temporada de pesca del pepino de mar de 2021 se abrió el pasado 21 de julio bajo acuerdo con las cooperativas de pesca, con una cuota de 600.000 unidades y toda vez que los resultados de los monitoreos poblacionales demostraron una recuperación del recurso tras seis años de veda.
Desde entonces, las autoridades ambientales, junto a la Armada y la Policía Nacional, han mantenido los controles permanentemente para asegurar que se cumpla con las regulaciones establecidas para la sustentabilidad de este recurso.