El ‘único’ cargo admitido
Desde Carondelet se ha montado una narrativa raramente triunfalista festejando que el “único” cargo admitido por la Corte Constitucional es el que acusa al presidente Lasso de peculado, habiendo quedado fuera las acusaciones de concusión. ¿No se dan cuenta de que no hay nada que celebrar? La Corte consideró que la redacción de las acusaciones por concusión contra Lasso no habían desarrollado un mínimo de coherencia para presumir la participación del presidente en aquellos actos que envuelven a los funcionarios del Gobierno del Encuentro y a un familiar cercano del presidente en la venta de cargos públicos. La corrupción es real pero, ¿hay que celebrar que el presidente aún no aparezca involucrado? La acusación que, para la CC sí tiene un mínimo de verosimilitud es “solo” la de peculado, acusación sancionada en la ley con pena privativa de libertad de 10 a 13 años. Consiste en el acto mediante el cual se abusa de un cargo público para beneficio propio o de terceros, uno de delitos que sanciona a los servidores públicos por robarse el dinero de la gente. Aquella acusación tuvo al expresidente Bucaram 20 años fuera de Ecuador. “Solo” de peculado fueron acusados quienes vergonzosamente hicieron fiesta de los recursos públicos en el sistema de salud pública en la pandemia. El órgano que hace el filtro de revisión es la CC como máximo órgano de control y administración de justicia en materia constitucional. La Corte de más alto grado ha dicho que existe una seria y verosímil presunción de que el presidente esté involucrado en peculado. ¿Celebran que “solo” fue eso? Es otro error pretender minimizar la acusación que el presidente Lasso enfrenta. Ojalá el circo termine pronto y el trámite y votos se despachen rápido, pues estamos normalizando llegar a la noche para contar muertos en las calles.