El mobiliario urbano, un blanco del deterioro
Bolardos de la avenida Barcelona están destruidos hace meses
Movilizarse por la avenida Barcelona, más aún cuando quien lo hace es un peatón o un ciclista, ha generado ya una serie de reclamos. Hace dos años, EXPRESO publicó la queja de los biciusuarios que denunciaron rodar por una ciclovía que incluso pasaba sobre los paraderos de buses o que era invadida por los vendedores informales. Esta vez, pese a que la queja por parte de los ciclistas se mantiene, hay otra que hace eco y está relacionada con las trabas que halla el peatón a la hora de desplazarse.
Y es que en el tramo que está entre la avenida Rodríguez Bonín y la Carlos Gómez Rendón, al pie de la compañía Holcim; al menos una decena de bolardos de cemento permanecen rotos sobre el piso, con los pedazos esparcidos y los hierros visiblemente retorcidos.
“Se supone que este mobiliario urbano fue colocado en el sitio para dividir la acera de la calle, y protegernos a quienes caminamos; lamentablemente, los ‘muros’ están rotos, la mayoría a causa de choques y no hay quien los reponga desde hace ya unos cinco meses, si no es más”, se quejó la residente Gabriela Jara, quien ha dejado de rodar por esa ruta con su bebé, por temor.
“Lo llevaba en coche y la vía es hasta oscura. ¿Así cómo nos ven los carros? Es imposible arriesgarse”, señaló.
Frente a esta situación, las familias hacen un llamado al Municipio a que dé mantenimiento al área o retire al menos los muros. Alegan que varios adultos mayores, en su intento por llegar a la vía y cruzarla, se han tropezado ya con los trozos de bolardos.