LA REVOLUCIÓN de los deportes de raqueta
El negocio mueve millones de dólares en Estados Unidos, teniendo al tenis, pádel y pickleball como las prácticas con mayor auge actualmente
El tenis seguirá siendo el rey, pero ya hay otros deportes de raqueta que están incrementando exponencialmente su número de practicantes año a año en Estados Unidos, entre ellos el pickleball y el pádel, dos disciplinas que están en pleno auge y ya despiertan el interés de nuevos jugadores, y también de grandes inversores.
Según estadísticas de la tierra del Tío Sam, el tenis ha experimentado un 33 % de crecimiento desde 2021; mientras que el pickleball (deporte que combina elementos del tenis, pádel, bádminton y tenis de mesa) también crece como la espuma, con 59 % más practicantes durante los últimos tres años, que ya fueron casi nueve millones en 2022. Eso sin dejar atrás el pádel, que continúa la línea de crecimiento que ya tenía en el resto del planeta como el deporte de mayor evolución, con más de 25 millones de jugadores alrededor del globo.
Y es que la demanda es muy superior a la oferta. De ahí que grandes capitales de inversión se acercan a los emprendedores de estas industrias para construir más centros y más pistas.
En Estados Unidos, estos deportes presentan matices de negocio diferentes respecto a Europa o Latinoamérica, por los costos para su práctica. A día de hoy, disputar un partido de pádel cuesta entre 20 y 30 dólares por persona, para un total de más de 100 dólares por noventa minutos en pista. El valor es claramente superior al resto del planeta, sobre todo al país referencia, España, donde se usa más la pala que la raqueta, con tres millones y medio de jugadores. Es ahí donde está la oportunidad de negocio, exportando la experiencia a un terreno aún virgen como Estados Unidos.
Celebridades de primer nivel están invirtiendo en la práctica, entre ellas estrellas como Lebron James, de la NBA, o Tom Brady, exjugador de fútbol americano. Eso sin contar a jugadores naturales de países donde el pádel ya es potencia, como Willy Hernangómez, jugador de baloncesto español, quien conoce las posibilidades que el pádel tiene en su ‘segundo país’.
El propio David Beckham es un asiduo al pádel; Eva Longoria compró un equipo de la Hexagon Cup; Daddy Yankee es dueño de la franquicia de Orlando de la PPL americana; mientras que deportistas de élite como Patrick Mahomes o Naomi Osaka han
invertido en pickleball, así como artistas como Drake o Michel B. Jordan. La lista es larga.
Marcos del Pilar, comisionado de la Pro Padel League (PPL), la primera liga profesional de pádel de los Estados Unidos, asegura que en su segunda edición el torneo ya logró reclutar jugadores de primer nivel mundial.
“En 2024 hemos recibido a los mejores jugadores del mundo, el nivel ha cambiado drásticamente. Esto significa que tenemos el respaldo y el apoyo de los mejores del planeta, lo cual es algo que nos enorgullece”, dice Del Pilar.
Los nombres hablan por sí solos: los Super Pives, Franco Stupaczuk, Martín Di Nenno, Paqui
to Navarro, Ariana Sánchez, Agustín Tapia… “La razón por la que ellos vienen es porque creen en la estructura y el formato”, afirmó el comisionado.
Uno de los factores para poder captar a estas estrellas es el económico. La liga ha hecho un esfuerzo con un millón de dólares en premios. El crecimiento se ve también en el aumento de franquicias de siete a diez, y podrán ser muchas más si se materializa el interés de todos los inversores que llaman a la puerta de Marcos del Pilar para entrar
en la PPL.
“Mantenemos conversaciones con muchos grupos interesados en comprar nuevos equipos en 2025”, señala.
El interés mediático también refleja el crecimiento, pues lograron cerrar acuerdos con 17 operadores para emitir la señal a nivel mundial. Cuenta con un alcance potencial de 85 millones de hogares en Estados Unidos a través de MSG en inglés y FOX en español, así como 110 a nivel global con operadores como DAZN o TV Azteca.