Diario Extra

¡Caminan por su fe!

- Redacción Quito

Caminar es el acto con el que los seguidores de Shoenstatt muestran su fe. Según Beatriz Cordero, una de sus representa­ntes en Quito, existe una diferencia entre la peregrinac­ión y la romería. La primera “vas cantando de de punto ‘x’ (equis) hasta el lugar santo, mientras que la segunda involucra carros, más fiesta y es otro tipo de logística”.

Todo comenzó a las cuatro de la madrugada desde Tumbaco, nororiente de Quito, a las 09:00 llegaron a Alangasí, ese lapso de tiempo entre la noche y el día es visto como un encuentro con el Señor.

“A las cuatro de la mañana todo es súper oscuro y poco a poco el día se va aclarando, entonces vemos la mano de Dios al ver cómo se va cambiando de negro a claro, escu

chas los pájaros, los gallos, los perros. Es valorar las cosas sencillas de la vida y encontrarn­os con nosotros mismos”, comentó.

En Guayaquil también se realizó la peregrinac­ión, la misma no sale desde un punto fijo, sino que por grupos se organizan y desde diferentes sectores de la urbe caminan. En Guayas hay un santuario en Samborondó­n y otro en la avenida Juan Tanca Marengo, de Guayaquil.

Fue la Perla del Pacífico la primera ciudad a donde llegaron los fieles de Shoenstatt, después que jóvenes del grupo Acción Católica conocieron de la Virgen.

Fue el sacerdote español, Juan Fernández, quien los educó después de que él conociera sobre la devoción a la imagen durante un encuentro en Chile.

“Nací para llevar una bandera”, era el lema que repetían los seguidores de este grupo religioso, la bandera actúa como un símbolo de aceptación total a la misión de la Virgen, según se explica en la página web del movimiento.

En un principio, sus fieles se congregaba­n en diferentes sitios hasta que en 1972 se pudo construir el Santuario y hacer honor a la llamada Madre Tres Veces Admirable.

Un cuadro de María con Jesús en brazos es su representa­ción, el que fue creado por el pintor italiano Crosso.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Ecuador