¡Identificado por los calzoncillos!
“¡Murió como un perro, como un cobarde!”, dijo Donald Trump.
Abu Bakr Al Baghdadi fue los últimos cinco años “el hombre más buscado del mundo” porque se supone era el creador de un “imperio del mal” como el Estado Islámico que estremeció a varias naciones del orbe.
Pero el anuncio del presidente Donald Trump de que se quitó la vida con un chaleco explosivo durante una operación militar de Estados
Unidos en el noroeste de Siria, cerca de la frontera con
Turquía, cautivó a la opinión mundial.
“Llevamos ante la justicia al líder terrorista número uno del mundo. Murió como un perro, como un cobarde”, afirmó el mandatario durante una conferencia de prensa.
Según Trump, el extremista murió atrapado en un túnel sin salida “gimiendo y llorando y gritando todo el tiempo” mientras era perseguido por unos perros de las Fuerzas Armadas estadounidenses.
Al parecer, el líder islámico se inmoló junto a tres de sus hijos. La explosión provocó un derrumbe en un túnel donde se intentaba esconder.
Fuerzas sirias dijeron que un espía robó la ropa interior de Abu Bakr al-Baghdadi, que luego se sometió a pruebas de ADN y se usó para demostrar su identidad antes de ser asesinado.
El presidente Trump minimizó el papel de las fuerzas kurdas, pero dijo que los kurdos proporcionaron información “útil”, pero agregó que no habían desempeñado “un papel militar en absoluto”.
“Toda la inteligencia y el acceso a al-Baghdadi, así como la identificación de su lugar, fueron el resultado de nuestro propio trabajo. Nuestra fuente de inteligencia estuvo involucrada en el envío de coordenadas, dirigir el lanzamiento aéreo, participar y hacer que la operación sea un éxito hasta el último minuto”, dijo una fuente siria.
DATO
EE.UU. y Siria se
disputan la autoría del éxito militar en torno a la baja del terrorista.