¡SE LES ROBARON EL FINADITO!
Cuando fueron a recordarlo al cementerio se dieron cuenta de que lo habían sacado a las malas. Tenía 10 años enterrado cuando los desalmados se lo llevaron. ¿Será por rito? ¿por mala fe? Nadie sabe. Misterio. Sucedió en Huaquillas, El Oro.
“No los dejan descansar en paz, son unos enfermos ”, dijo muy enérgico Manuel Maldonado, quien acudió al cementerio municipal del cantón Huaquillas, provincia de El Oro, para arreglar la tumba de su ser querido, en víspera del Día de los Difuntos. Él se llevó la desagradable sorpresa de ver profanada una tumba cerca a la de su pariente.
Según el hombre, en la bóveda habían hecho un hueco y sacado los restos. No había nada, solo dejaron escombros. Entonces, Maldonado avisó al panteonero, quien a su vez buscó a los familiares del fallecido que estaba enterrado en el sitio.
Fue la tarde del jueves cuando se percataron que la bóveda estaba rota. Los delincuentes se llevaron las prendas y hasta los restos óseos del difunto. Se trata de Jinson Paúl Rogel Cartuche, quien falleció el 1 de agosto de 2009.
Según informe policial, por coordinación del Centro de Seguridad se trasladaron al antiguo cementerio municipal, donde tomaron contacto con varios ciudadanos, quienes denunciaron el robo de los restos mortales.
“Un ciudadano que vino a adecentar la tumba de su familiar pasó por el lugar, percatándose que una bóveda estaba partida, donde se notaba que fue saqueada, llevándose los restos óseos del fallecido”, indica el informe preliminar del Distrito de Policía de Huaquillas.
INDIGNACIÓN
César Cartuche, familiar del finado, indicó que llegaron a su casa a avisarle que habían profanado la tumba de su ser querido. Al llegar al camposanto vieron que, por la parte posterior de la bóveda, habían roto el concreto y sacaron el ataúd.
“Recién nos enteramos hoy día (jueves) cuándo será que se lo llevarían. No sabemos qué hacer ahora”, dijo Cartuche, quien esperaba reunirse con todos los familiares para tomar una decisión.
La familia del finado está indignada. “Para que vea cómo es la gente malosa que se llevan el cuerpo del finadito Paúl, se le llevan los huesitos, se le llevan todo a mi panita”, dijo un amigo que prefirió no identificarse.
Los allegados piden una investigación que permita establecer quiénes sacaron los restos. Ahora, ellos solo se resignan a prender una vela a la foto del finado, lo único que dejaron los profanadores.
SOSPECHAS
Creen que la profanación sería obra de estudiantes de medicina que buscan huesos para prácticas, ladrones o brujos.