¡3 ASESINATOS EN 72 HORAS!
Pillo ingresó al local para robar las pertenencias de los trasnochadores y la víctima le dio un botellazo, pero no logró ‘noquearlo’ y le costó la vida.
✓ Esta vez la víctima resultó ser el cliente de una barra que se opuso a ser atracado.
✓ Para intentar evitar la acción delictiva le pegó un botellazo al pillo.
✓ El ladrón sacó un revólver y le metió un pepazo en la cara.
✓ Pese a que huyó con otro en una moto, hay indicios de quién es el responsable del pavoroso hecho de sangre.
En menos de 72 horas, la provincia de El Oro vuelve a mancharse de sangre. Esta vez, la madrugada de ayer, en el cantón Arenillas, asesinaron a un hombre en el interior de una barra. Con este caso su man tres muertes a disparos en la misma zona de frontera.
Se trata de Ítalo Francisco Sarango Sarango, de 36 años de edad, quien a las 23:30 del último viernes decidió acudir al negocio de su hermano. Se sentó en la barra para tomarse unas cervezas y entre copas y copas pasó una hora.
Libaba tranquilo cuando ingresó un sujeto armado. Su intención era robar a todos los clientes. Mientras el pillo ejecutaba su plan, Ítalo habría agarrado una botella de cerveza y en un descuido la quebró en la cabeza al presunto delincuente.
Él pensó que con eso iba a ‘noquear’ al asaltante, pero no fue así y este sin pensarlo dos veces le descargó un tiro en la cara que le quitó la vida en el acto. Con lo acontecido, el sujeto salió del bar velozmente.
“Él (Ítalo) pensó que el delincuente estaba desarmado, porque el arma la tenía en su pantalón. Cuando le da el botellazo, él la saca y le propina un disparo en el rostro”, dijo Javier Sarango, hermano del occiso, quien fue testigo del crimen.
Tras el delito, el presunto asesino se dio a la fuga junto a su compinche que lo esperaba en una motocicleta.
Los vecinos aseguraron que el vehículo estaba encendido, listo para fugarse por la vía Panamericana.
Según el propietario del local, los delincuentes se sustrajeron las pertenencias de los clientes como celulares, billeteras y dinero de la venta de la noche.
Una vez que el resto de los deudos se enteraron de lo acontecido se comunicaron con el ECU 911. Agentes de la Policía Nacional y paramédicos del Ministerio de Salud Pública (MSP) llegaron al lugar y constataron que el hombre no tenía signos vitales.
El fallecido dejó tres hijos procreados con Miriam Songora, quien exige justicia.