¡LA ‘PROFE’ SE COLGÓ!
Se presume que la víctima se suicidó. Ella trabajaba en un centro de desarrollo infantil y era muy querida por los habitantes de Engunga. Sus familiares no creen que se haya quitado la vida.
María Elizabeth Gonzabay Alfonso, de 59 años, fue hallada muerta en su domicilio de Engunga.
Los familiares de la maestra de un centro de desarrollo infantil dudan de que se haya quitado la vida.
Con una piola atada en su cuello y colgando de un tirante de madera que sostenía el techo de su habitación fue encontrada sin vida, a las 22:30 del martes pasado, la educadora María Elizabeth Gonzabay Alfonso, de 59 años, quien se habría suicidado.
El hecho ocurrió en la población de Engunga, perteneciente a la parroquia Chanduy, al sur del cantón Santa Elena. El imprevisto deceso de la mujer causó gran conmoción en el lugar, donde a pesar de la noche decenas de personas salieron de sus hogares para acudir a la vivienda de la occisa y conocer más detalles de lo acontecido.
“No puede ser que ella esté muerta, si hasta hace poco chateó en un grupo de WhatsApp y se la notaba bien”, decía una de las mujeres presentes, mientras mostraba en su teléfono móvil los últimos mensajes que su amiga escribió.
María Elizabeth era soltera y habitaba sola en el inmueble donde se la encontró. Según Blanca Quimí, tenienta política de Chanduy, fue un vecino de la maestra quien acudió a buscarla y al ver todo oscuro ingresó a la casa y la halló colgada, por lo que de inmediato avisó a otras personas, quienes se quedaron asombrados al ver la terrible escena.
La autoridad parroquial solicitó la presencia del personal de la Dinased para la respectiva investigación y levantamiento del cadáver. Quimí y los peritos examinaron el inmueble para encontrar algún indicio que ayude a conocer el motivo por el cual la educadora se suicidó.
LABORABA EN UN CENTRO INFANTIL
María Elizabeth Gonzabay Alfonso era muy querida en su comuna. Ella laboraba en el Centro de Desarrollo Infantil Caminitos Alegres. Las personas que la conocían indicaron que no demostraba que tuviera problema alguno e incluso estaba a punto de conseguir su título de tecnóloga de Desarrollo Infantil en el Instituto Simón Bolívar, en la ciudad de Guayaquil.
“Ella viajaba todos los fines de semana a sus clases. Ya estaba en el último semestre y se la veía muy emocionada, a punto de alcanzar su título profesional. Su muerte es inexplicable”, dijo Gabriel Suárez, uno de sus conocidos.
El llanto de los familiares fue incontenible cuando se trasladó el cuerpo a la morgue de Santa Elena, para las diligencias respectivas.
Entre sollozos, los presentes recordaban las enseñanzas que la maestra inculcaba a los niños y que ahora ya no podrán recibir.
Es un misterio la muerte de mi prima. Pedimos que la policía investigue el caso porque tenemos dudas de que se haya ahorcado”.