IBARRA LA SACÓ BARATA
La especialista explicó que en ocasiones las víctimas se retractan porque sienten culpa por lo que le pueda pasar al denunciado.
El ecuatoriano Renato Ibarra fue puesto en libertad, luego de que su esposa Lucely Chalá retirara los cargos por violencia intrafamiliar e intento de feminicidio.
“Una de las características de la violencia en las relaciones de pareja y que a veces es extraña para las personas, es porque hay una relación afectiva que lleva a que las víctimas se retracten de la denuncia”, explicó la psicóloga clínica, Patricia Reyes, sobre la decisión de retractarse de Lucely Chalá, esposa de Renato Ibarra. El pasado jueves en la segunda audiencia ante la jueza de control, Chalá, quien tiene un embarazo de diez semanas, se retractó de las acusaciones sobre Ibarra en el episodio de violencia doméstica. “No, no me agredió físicamente. No recuerdo haber dicho eso en la entrevista”, exclamó Chalá en el tribunal.
Reyes, psicóloga del Centro Ecuatoriano para la Promoción y Acción de la Mujer (CEPAM), recalcó que, en varios casos como este, las víctimas cambian su opinión tras la denuncia porque tienen el sentimiento de culpa con la persona que es o fue su pareja sentimental. “Ellas mismas no se quieren sentir mal por haberlo mandado a la cárcel o haberlo dejado sin trabajo. Por otro lado, también hay amenazas. Debe tener cuidado”
CORRE PELIGRO
La especialista manifestó de que Lucely Chalá deberá tomar sus precauciones necesarias para que no sufra otro episodio de violencia doméstica. “Cuando ya hay una tentativa de femicidio hay un alto riesgo de que vuelva a agredirla. Cuando hablamos de tentativa es porque ya hubo un deseo de matar, pero que no se logró cometer”.
Finalmente, agregó que en estos casos las víctimas tienen que hacer respetar las medidas cautelares y de que su entorno familiar se convierta en su apoyo en la toma de decisiones. “Si ella ha decidido continuar la relación está en una situación de riesgo”.
UNA LARGA SEMANA
Ibarra fue detenido por la policía de Ciudad de México el pasado 5 acusado de agredir físicamente a Lucely Chalá.
El pasado sábado 7, el futbolista ecuatoriano fue trasladado al reclusorio y el domingo, tras la primera audiencia ante la jueza, le fue impuesta la prisión preventiva oficiosa por tres delitos: violencia intrafamiliar, tentativa de feminicidio y tentativa de aborto.
El jueves se llevó a cabo la segunda audiencia ante la jueza de control de México.
A pesar de que fue una audiencia privada, se filtró a las redes sociales un video en el que Lucely se retracta de las acusaciones que hizo por escrito y también niega haber dado las declaraciones que publicó la revista TV Notas.
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AÑOS tiene Renato Ibarra