‘Pinchados’ antes de volver
Los jugadores de Barcelona son visitados por un grupo de médicos laboratoristas contratados por el club canario, para que les realicen las pruebas rápidas de COVID-19.
La finalidad de este procedimiento es saber si están aptos para retornar a los entrenamientos el próximo 8 de junio.
Los laboratoristas acuden acompañados de los integrantes de departamento médico del cuadro torero, quienes están pendientes de los resultados para saber si existe algún futbolista contagiado, para que pueda ser tratado a tiempo.
Los colaboradores involucrados con los entrenamientos del equipo amarillo, entre ellos utileros y empleados del estadio Monumental, también han sido considerados en estas visitas que empezaron el martes pasado, como parte del plan de retorno a las actividades deportivas.
Estas son las segundas pruebas al plantel, luego de las que hicieron al comienzo de la cuarentena, por las dudas que existían, tras el partido disputado a inicios de marzo en Río de Janeiro, Brasil, por Copa Libertadores ante Flamengo.
ESPERAN RESULTADOS
El Bombillo quiere llegar sano a los entrenamientos. Por eso los dirigentes ordenaron realizarles la prueba rápida a sus jugadores entre lunes y martes. Al momento están a la espera de los resultados para saber si existe algún contagiado de COVID-19 y aislarlo para su tratamiento.
La idea es quedar a punto esta semana para el reinicio de los entrenamientos el 8 de junio en las instalaciones del Polideportivo Samanes, donde deberán someterse a un riguroso sistema de trabajo, basado en el protocolo que el club eléctrico presentó a las autoridades para poder volver a las canchas.
Según el cuerpo médico, que lidera el doctor Celio Romero, la idea es adelantar el protocolo médico para que el 8 de junio no existan ‘correteos’ y se pueda trabajar con tranquilidad.