Consultorio Sentimental
“ME GUSTAN LAS COLEGIALAS”
Me llamo “Gastón”, tengo 37 años y debo confesarle que trabajo en un colegio como profesor de matemáticas; doy clases a primero de bachillerato. La situación es que me atraen ciertas jovencitas y llegué a enamorarme platónicamente de una alumna de 17 años. Esa muchacha me gusta y parecería que también a ella, pero no estoy tan seguro de que sienta lo mismo que yo. Le comento que me cohíbo por ser docente y prefiero dejar las cosas allí. Sin embargo, esa chica me gusta, y por eso le escribo a usted para ver qué solución podría tener, o qué me podría aconsejar. Al parecer, ella de lejos me mira, pero de cerca no me dice nada. Le comento que cuando estuve en la escuela me fijé en una chica de mi curso, pero nunca pasó algo, no pude ser enamorado de ella ni en el colegio, porque siempre he sido tímido. En otra ocasión me gustaba una compañera, pero tenía enamorado. He tenido parejas mayores de 30, pero no es lo mismo. Hasta la fecha estoy solo y por diferentes circunstancias de la vida no he logrado tener una pareja oficial. Mi caso es complicado. Por favor deme un consejo.
Respuesta:
“Gastón”, no es moral ni legal que se deje llevar por esos sentimientos. Usted debe ser un maestro ejemplar. Por mucho que le atraigan ciertas alumnas, no debe ni puede enamorarse de ellas. Usted más que nadie debe saber lo delicado que es involucrarse con las estudiantes, y más si son menores de edad. Creo a sus años debe pensar en tener una esposa y formar un hogar. Pues ya es tiempo de que comience a enfocarse en mujeres contemporáneas a usted. Meterse con una chiquilla le podría traer serias consecuencias. No es difícil encontrar a la pareja indicada, lo que pasa es que debe asistir a reuniones, pero bien bañado, si es posible con agua de rosas y con un pedazo de raspadura, luego de enjuagarse usar un buen perfume en el cuerpo, para que cautive a las mujeres de su misma edad. Deje de mirar a uniformadas, no dañe su reputación por gusto, ya que puede terminar en la cárcel. ¡He dicho!