“Jubilación de policías está garantizada”
María Paula Romo se reunió con el consejo de generales para analizar las inversiones de riesgo efectuadas en el Isspol.
Increíble, pero cierto. Al Instituto de Seguridad Social de la Policía (Isspol) se le ‘patearon’ más de 500 millones de dólares y ahora busca cooperación internacional para dar con los responsables de la estafa y la ruta de las transacciones.
Y para tranquilizar a los pensionistas, la ministra de Gobierno, María Paulo Romo, aseguró que “la jubilación de los policías está garantizada, porque existe una ley que obliga al Estado a asegurar el pago de todo lo que se adeude por estos conceptos”.
Este delito habría sido perpetrado entre 2014 y 2016, según Romo. En el caso están involucradas dos empresas con asiento en Panamá.
Una investigación ejecutada por esta cartera de Estado y la propia entidad policial encontró dos tipos de inversión aparentemente irregulares, por un monto global de 532 millones de dólares, lo cual, según Romo, representa una “estafa a los fondos de jubilación y pensiones de la Policía”.
La funcionaria explicó que la primera es una operación financiera para obtención de liquidez o reestructuración de portafolio (tipo swap), en la que el Isspol se había comprometido a “intercambiar bonos por 327 millones de dólares de deuda interna ecuatoriana”, con una empresa privada.
La segunda se desarrolló “a lo largo de tres años en pequeñas cantidades de compra de bonos de deuda externa”, por un monto que alcanzó los 205 millones de dólares.
NO ASOMABA EL ‘BILLUZO’
La operaciones fueron realizadas con Jorge Chérrez Miño, el representante legal de dos empresas afincadas en Panamá que, a su vez, había ofrecido que el monto de las transacciones sería custodiado por la compañía Depósitos y Compensación de Valores del Ecuador (Decevale).
La empresa privada no entregaba el dinero a la Isspol, sino “más papeles que tampoco se encuentran en poder” del Instituto de Seguridad Social de la Policía, dijo Romo, que además identificó a David Proaño Silva, exdirector del Isspol, como uno de los principales involucrados.
De su lado, el actual director del Isspol, Jorge Villarroel, se quejó de que no ha recibido respuesta de Decevale sobre las inversiones que ha hecho la institución a su cargo.
“Nunca nos dieron la información precisa, generando desconfianza. Y eso hizo que se tomen las medidas que la normativa legal nos permite”, precisó Villarroel. “No vamos a descansar y estamos seguros de que no podrán esconderse ni los autores, ni la transacción que hicieron”, recalcó Patricio Carrillo, comandante de la Policía.
Al momento, la Isspol tiene pagos vencidos por más de 100 millones de dólares.
La sociedad ecuatoriana, el Gobierno, el Estado van a tener que obtener los recursos necesarios para cubrir las inversiones”.
MARÍA PAULA ROMO,
ministra de Gobierno