¡Deje que los ‘pelados’ elijan!
Los padres son influencia para sus hijos, pero deben ‘soltarlos’ para que sean ellos quienes decidan por sus gustos o creencias. La imposición podría generar inestabilidad.
El padre es hincha a muerte de Barcelona, la madre de Emelec. Él es testigo de Jehová y ella católica... Pero ¿qué pasa con la descendencia de parejas con gustos o creencias tan opuestas?
Sin duda, cada hijo decidirá a qué ‘bando’ se inclina. Para ello, los progenitores deben ser quienes le expongan las dos o más alternativas que existen, presentarle lo bueno y lo malo, los pros y contras, todo lo que concierne a opción religiosa, deportiva, etcétera, dice la psicóloga clínica Susana Osorno.
La especialista en salud mental recomienda no obligarlo ni tratar de persuadirlo. “Dialogue con el pequeño cuando usted vea que él tiene una comprensión del lenguaje. Recuerde hacerlo acorde a su edad, con palabras sencillas”, indica.
Asimismo, la orientadora familiar Lorena Erazo sugiere que en los diálogos que mantengan se mencionen las consecuencias que vivirá en el núcleo familiar. “Se pueden presentar burlas entre hermanos. De pronto de adulto le tocará ir solo a un partido de fútbol, a la iglesia”, señala la experta.
Presionarlo podría causarle un nivel bajo de estrés y en el niño puede generar inestabilidad y probablemente se haga del tipo de personas que busca quedar bien con los otros, por lo tanto, apoyará un día a uno y luego al otro, finaliza Osorno.
Así opinan
SUSANA OSORNO Psicóloga clínica Si los padres tienen dificultades en ponerse de acuerdo sobre sus preferencias (de cualquier tipo), el niño lo va a percibir desde el vientre”.
LORENA ERAZO Orientadora familiar Que su inclinación no sea por imposición, sino porque hemos influenciado positivamente en ello. El ejemplo cuenta mucho”.