Se quedó con las GANITAS
Ana Ponce, una fanática de la argentina, practicó la coreografía de una canción. Tenía la esperanza de que la artista leyera su cartel y la hiciera subir al escenario.
El sueño de Ana Ponce era que la cantante Tini Stoessel leyera el cartel que sostenía y la invitara a bailar en el escenario con ella.
La noche del jueves, Ana, con 24 años y bailarina profesional, llegó hasta el Coliseo General Rumiñahui, en el norte de Quito, para disfrutar del espectáculo de la argentina. Su amiga Isabella Banda la acompañaba.
Son fanáticas de Tini desde que en 2012 interpretó a Violetta en una serie de Disney Channel.
Pocos días antes del show, ambas se animaron a comprar los boletos para el concierto que la intérprete de ‘Miénteme’ compartió con la banda CNCO.
En escena, Tini brilló por casi dos horas con sus pasos de baile y coloridos atuendos, pero sobre todo por su voz. Ana quedó impresionada con la performance. Desde su silla ‘cruzaba los dedos’ para que Tini la notara y le permitiera acompañarla en la coreografía. No pasó, pero eso no impidió que las dos amigas se divirtieran y corearan su repertorio.
Al ritmo de ‘Fresa’, ‘Fantasi’, ‘Triple T’, ‘La Loto’, ‘Oye’, ‘Carne y hueso’ y muchas más, la artista conquistó al público.
Pero el momento más emblemático de la noche fue cuando la cantante se cobijó con el tricolor ecuatoriano para cantar varios temas.
Durante su actuación, Tini se dio tiempo para interactuar con el público y hasta se probó una ‘campera’ (chompa) de mezclilla que le entregó una seguidora. En letras fucsias estaba escrito su nombre.
LA MODA TINI
Aunque el show de la argentina se ‘robó’ los aplausos de los asistentes, no fue lo único que llamó la atención. La moda Tini (pantalones anchos, tops rosas, coletas y brillos en el cabello) fue el ‘uniforme’ de las fanáticas.
Muchas iban acompañadas de sus padres. María Claudia Castellanos y Sofía Tamayo, por ejemplo, confeccionaron guantes rosados para lucir como Tini. Las niñas, de 12 y 13 años, renunciaron a sus regalos de cumpleaños para disfrutar del espectáculo. Adoran su música, pero sobre todo esa ‘vibra’ que ella
comparte con la gente.
Natalia Devotto, una argentina que reside en Cumbayá, oriente de Quito, también se convirtió en fan de Stoessel al escuchar a sus hijas cantar las melodías.
Hoy se confiesa seguidora de su compatriota y hasta se anima a decir que Tini, quien hace dos años era novia del colombiano Sebastián Yatra y ahora del futbolista Rodrigo De Paul, estaría mejor sola como la mujer empoderada que es.
CNCO encendió los ánimos
La banda CNCO abrió el show. Hora y media fue suficiente para que interpretara sus éxitos ‘Mamita’, ‘Hey DJ’, ‘Reggaetón lento’ y otros.
A Dayana Arias, una fanática de los chicos, la acompañó su novio, Leonardo Espinoza. “Si te apoya en tu gusto por CNCO, ahí es”, bromeó. Para ella, el integrante más guapo del grupo es el ecuatoriano Christopher Vélez.
EL DATO
En una butaca, como un miembro más del público, estaba Alejandro Stoessel, padre de Tini. Disfrutó del show y hasta se tomó fotos con quienes lo reconocieron.