¡CUMPLEAÑOS en Ecuador!
Los hermanos Joaquín y Lucía Galán celebran sus 40 años de actividad musical. El viernes 28, la cita es en el coliseo cerrado de Guayaquil; al día siguiente, en Cuenca.
Parece que fue ayer cuando Joaquín (67) y Lucía (61) Galán lanzaron el inolvidable tema Olvídame y pega la vuelta, convertidos en el dúo Pimpinela.
Han pasado 40 años y se han mantenido vigentes con éxitos como ‘A esa’, ‘Valiente’, ‘Una estúpida más’, ‘Por ese hombre’... o con temas como ‘Payaso’, ‘2020, el año que se detuvo el tiempo’ o ‘Siempre vivirás dentro de mí’, dedicado a su madre, María Engracia, quien falleció a los 96 años, en plena pandemia.
Los hermanos, nacidos en Argentina, llegarán a Ecuador mañana. Guayaquil y Cuenca son parte de su gira para celebrar 4 décadas cantándole al amor, desamor, a las traiciones y reproches que suelen tener las parejas y ellos las plasman en sus letras.
Nunca planearon cantar juntos. En la adolescencia, Joaquín era parte de la banda Luna de Cristal, mientras que Lucía tomaba clases de actuación y era corista. Desde Argentina, EXTRA conversó con ellos. No han hecho exigencias fuera de lo común. Como profesionales que son lo que les interesa es la puesta en escena de sus conciertos.
El primer escenario en el que se presentarán en Ecuador es en Guayaquil (viernes 28) y el segundo en Cuenca (29). ¿Qué le ofrecerán a esos públicos?
Lucía: Una fiesta de cumpleaños. Cantaremos esos temas que fueron parte de nuestras carreras, desde Olvídame y pega la vuelta, Valiente, El amor no se puede olvidar y por supuesto los nuevos. Serán dos horas de concierto en el cual la gente participará porque cantará, se emocionará... habrá una corriente entre el público y nosotros, que se sienta muy cercano. Queremos que se vayan con un lindo recuerdo.
En el mismo año de la crisis sanitaria, ustedes perdieron a su madre, quien siempre quiso verlos cantar juntos.
Joaquín: Mi madre nos apoyaba, nos incentivaba a formar un dúo, pero yo le decía que, si no aparecía algo novedoso, no le veía el atractivo. Ella sentía lo que había dentro nuestro. En una ocasión le dijimos en broma: “qué buena productora que fuiste mamá, cómo supiste que nos iba a ir tan bien”. Respondió que solo quería vernos juntos (risas).
Lucía: Nosotros cantábamos de chicos y mamá lo único que hacía era insistir para que hiciéramos profesionalmente lo que hacíamos en casa. Por ella estamos cantando. Tuvimos la dicha de tener dos padres amantes de la música y que nos apoyaron a pesar de que nuestra familia era de clase media normal y que nuestros aportes habrían sido muy importantes para la economía del hogar. Sin duda, mamá fue nuestra auténtica mánager.
Las modas son pasajeras y se las lleva el viento, ustedes se han mantenido vigentes. Se dice fácil, pero no es así.
Joaquín: Siempre nos fuimos adecuando al tiempo y a la temática de la sociedad. Nunca quisimos ser moda, las modas son pasajeras. Primero buscamos una justificación para hacer el dúo, con algo diferente. Encontramos la dramatización, lo que le gusta a Lucía, y en mi caso, componer. Luego de eso hicimos un camino propio, sin copiar a nadie. Pimpinela te gusta o no, traspasa las modas y el tiempo, nuestra música romántica es atemporal. Aquello ayudó para seguir cantando 40 años, también tienen que ver la disciplina, la perseverancia, la pasión por lo que hacemos y lo que aprendimos de nuestros padres.
En algún momento la vida se encargará de separarlos, ya sea porque a uno de ustedes la voz no le dé, se sientan cansados o la muerte llegue.
Joaquín: No nos hemos planteado aquello, siempre vivimos el presente, nos gusta ser previsores, hacer planes a mediano plazo nos da ilusión. En marzo, abril o mayo del 2023 ya sabemos lo que haremos, qué grabaremos. Eso nos da longevidad. Sentarnos en una mesa a planificar sobre el fin de nuestra carrera sería algo muy deprimente. Sabemos que no existe la eternidad, el pensamiento atrae las cosas y atraer el final nuestro no nos hace gracia.
Lucía: Yo sí creo que hay Pimpinela para rato, si en algún momento nos olvidamos las letras (risas), ahora la tecnología ayuda a los artistas a seguir. Tenemos mucho para dar.