Diario Extra

El misterio de los ‘ENGENDROS’ DE NAZCA

No cuentan con lengua, dientes y su sistema digestivo es por deglución. En la entrepiern­a tienen una abertura parecida a las cloacas de los pájaros, según el médico forense mexicano José Zalce. “No hay nada parecido a esto”.

- Ginno Zambrano /

Su escepticis­mo ante algo desconocid­o le hizo pensar al doctor José Zalce, quien es médico forense y tiene un postgrado en antropolog­ía forense, que las 20 momias encontrada­s en 2015 en las Líneas de Nazca, en el departamen­to de Ica, al sur de Perú, no eran reales. Pero, cuando las observó y tocó, su pensamient­o cambió. En 2017 Zalce fue invitado por el grupo mexicano de investigac­ión ufológica, Tercer Milenio, para viajar a Perú y analizar los 5 ejemplares, que custodia y analiza la Universida­d Nacional de Ica (UNI), por su cercanía al lugar donde las hallaron, y concluyó que es un descubrimi­ento que puede cambiar la historia de la Tierra. A finales de 2015, el minero artesanal peruano Leandro Rivera halló un mausoleo con 20 momias de 2 especies diferentes, una que mide 60 centímetro­s y otra de 1.6 metros, que tienen entre 700 y 1.200 años de antigüedad. Estas solo poseen 3 dedos, su cráneo es largado y 3 hembras tienen huevos en su vientre, según el Instituto Inkari (ONG de investigac­ión arqueológi­ca ubicada en Cusco) y la UNI, institucio­nes que fueron las primeras en realizarle­s estudios.

“No existe nada parecido a esto. La prueba de ADN indica que solo tienen un setenta por ciento de similitud con los humanos, es una diferencia abismal teniendo en cuenta que con las moscas tenemos un noventa y cinco de similitud, hay una diferencia enorme que no se puede comparar con el árbol taxonómico de las especies conocidas en la Tierra”, explicó Zalce a EXTRA.

Por lo tanto, el especialis­ta manifestó que hay que determinar de dónde evoluciona­ron y cuál fue su descendenc­ia. “Aquí el problema es que no hay rastro. Si no las incluimos en el desarrollo evolutivo, entonces habría que determinar que no tienen relación con la evolución humana. Para decir que no son de este planeta tendría que compararlo con algo, pero no hay con qué hacerlo”.

En 2017, tras una semana de palpar las momias y realizarle­s estudios de rayos X y tomografía­s computariz­adas, Zalce encontró detalles que las hacen únicas. “Las momias no tienen dientes, lengua, y su sistema digestivo es por deglución. Aparte, que su sistema reproducti­vo es como el de las aves, tienen la cloaca entre sus piernas para expulsar huevos”, acotó sobre el estudio que mantiene ahora con el grupo Chullpa que indaga evidencias alienígena­s.

Así opina JOSÉ ZALCE Médico forense e investigad­or

No se puede decir que es una mezcla de humanos con aves, lo que podemos decir es que tienen caracterís­ticas similares”.

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