4 ERRORES COMUNES EN LA ALIMENTACIÓN DEL BEBÉ
1. No tener rutinas
Establecer una rutina de horarios ayuda a tu hijo a saber qué esperar en cada momento, y a no alimentarse de jugos, dulces, postres lácteos o aperitivos salados. Por regla general, los bebés suelen comer pequeñas porciones cada 2 o 3 horas. Así, el día puede dividirse en 6 comidas más o menos elaboradas, pero bien planificadas para evitar el picoteo poco saludable.
2. Interferir en la cantidad que comen
Es un error no respetar la cantidad que tu bebé quiere comer, porque, al igual que los adultos, solo él es capaz de decidir cuánto necesita comer para saciarse. Esta es una habilidad natural del cuerpo humano. Cuando los padres respetan la cantidad que el niño come, o si come o no, el niño aprende a regularse y a confiar y escuchar las señales de su cuerpo.
3. Obligar a comer
Ignorar las señales de su cuerpo puede conducir en el futuro a la obesidad. Aunque sea una cucharadita, y una cucharadita no hace daño, lo cierto es que no es la cantidad de comida en sí misma la que causa el problema, sino la acción de hacer al niño ignorar a su cuerpo.
4. Dar la leche de vaca
Algunos doctores consideran que no está bien darles leche de vaca a niños menores de tres años. En esta etapa la leche materna debe ser la prioridad, en su defecto la de fórmula. Aunque la mayoría de las leches de “tarro” están elaboradas a partir de la leche de vaca, están modificadas con este propósito. Después de los tres años de edad, el niño puede tomar lácteos con más frecuencia, pero sin exagerar.