OLORES QUE ENLOQUECEN
Si de atracción se trata, el olfato juega un papel fundamental. Actualmente resultan irresistibles los aromas dulces y frutales.
Es un tema de instinto: atraer a personas del sexo opuesto es parte de nuestra misma naturaleza. En el caso de la mujer, la elección del outfit – trajes sensuales, delicados o, incluso, muy reveladores-, así como la forma de mirar y moverse constituyen armas que, consciente o inconscientemente, utilizan para atrapar a su ‘ presa’. Y entre ellas, el aroma se convierte en factor fundamental. Las feromonas, aquellas sustancias químicas naturales que tenemos los seres humanos, provocan reacciones en los otros, aun cuando resultan imperceptibles. Y si a estas le sumamos el perfume perfecto, el resultado puede ser devastador… en el buen sentido. DOMINGUERO conversó con Malena Aguirre Valdez, jefa de marketing de perfumería Bibi’s, quien nos habló de las nuevas tendencias en aromas, cuáles son las más populares y su efecto. “Actualmente lo que domina el mercado son los aromas dulces y frutales. Por ejemplo, la mezcla de algodón de azúcar, vainilla con las frutas. Es lo que gustan y buscan ambos sexos”, aseguró Aguirre. Los varones se inclinan por perfumes amaderados, sin embargo, la tendencia de aromas dulces se impuso y ellos también los llevan, “esto se da porque pue- den usarlos tanto en la mañana como en la noche, en un almuerzo de negocios como en salidas nocturnas, ya no tienen que cambiarlos, ni comprar varios de diferentes creadores, basta con uno o dos y esos los alternan”. En estas mezclas se usan las notas cítricas como la naranjilla y maracuyá. Según la ejecutiva, el perfume que los hombres siempre llevan es el del Invictus, “porque tiene esa combinación de frutas con aromas dulces”. En las mujeres es igual, se mezclan lo dulce con lo frutal. “En las señoras más clásicas o las mayorcitas pegan mucho los dulces- florales. Por ejemplo, el más vendido es La vida es bella. Vendemos inspiraciones, que es un aroma que va a oler el 99 % similar al original”, explicó Aguirre.