ENAMORADOS
Solo sabe que está ahí y es real. Solo quieren poder abrazarse muy fuerte. Por ahora no pueden. Por ahora hay que esperar un poco.
Paso a paso. Llevan días conversando. Conociéndose. Alegrándose el día cada que despiertan y leen el mensaje del otro aún con los ojos lagañosos. El detalle es parte de la rutina diaria y no encontrar el mensaje lo desconcertó aquel día. Le escribió y nada. Ni siquiera lo lee.
Sigue con la rutina. Va a ducharse, vestirse y desayunar. Y nada. Ni rastro. ¿ Qué habrá pasado?, se pregunta. Revisa la conversación del día anterior esperando encontrar una pista que lo ayude a entender la repentina ausencia. Nada fuera de la común. Frase tras frase empalagosas. De esas que le gusta expresar cada minuto cuando siente ese nudo en el corazón. El mismo nudo que siente en la garganta y en el estómago cuando conversan.
El vínculo aún está en la fase del chateo. No avanza a las llamadas telefónicas, ni las videollamadas. Está a punto de marcarle, pero no. No quiere apresurarse ni parecer desesperado cuando solo han pasado dos horas desde que inició la jornada de aquel martes. Va al trabajo. En este punto suele decirle que está camino a cumplir su obligación laboral. A lo que recibía un mensaje de “anda con cuidado”. Pero nada. Empieza a preocuparse. Concentrarse es complicado en esa condición. ¿ Cómo puede alguien que está conociendo afectarle tanto? “Costumbre”, piensa. Es más que eso. Y lo sabe. Mediodía y la inquietud lo carcome por dentro. Se ve tentado a llamarlo, pero prefiere esperar un poco más.
Dos, tres cuatro horas. No puede más. Está a punto de marcarle cuando recibe un mensaje. Sí, ya era hora. Está entre intrigado, angustiado y enojado. Espera una explicación. Lo primero que recibe es una disculpa. Se tomó parte del día para pensar en esto, en ellos, en lo que siente. Pese a que solo se conocen por chat le parece que es suficiente para llegar a una conclusión: está enamorado. Aliviado. Desconcertado. A punto de llorar. Una nueva mezcla de sentimientos que no puede explicar. Solo sabe que está ahí y es real. Solo quieren poder abrazarse muy fuerte. Por ahora no pueden. Por ahora hay que esperar un poco. Por ahora quieren disfrutar el momento.