Comité: los fallos se emitían con textos copiados
El 90% de los textos era copia de otras sentencias, pese a que los casos eran diferentes
El Comité que evaluó a la Corte detectó que el 90% de los textos de los fallos era copia de otros casos diferentes
La evaluación a los jueces y conjueces de la Corte Nacional de Justicia arroja más información sobre el trabajo que ejecutaban en este alto Tribunal. El Comité Evaluador analizó 349 fallos y detectó que estos eran emitidos sobre formatos o matrices preestablecidos.
Tras analizar los textos de estos pronunciamientos judiciales, los evaluadores detectaron que el 90% era copia de otros fallos y solo el 10% contenía una argumentación jurídica.
Este Diario revisó, por ejemplo, dos casos que el 23 de julio del año pasado emitió un conjuez nacional. El primero se refería a un juicio por cobro de facturas y el segundo a la anulación de una sentencia. Pese a ser dos causas diferentes, todo el texto era el mismo.
Ese magistrado reprobó la evaluación, pues obtuvo 66 puntos sobre 100 y ahora está a la espera de una recalificación de las nota en la Judicatura.
De hecho, hoy termina el plazo para que los evaluados pidan a esta entidad que se revisen los puntajes obtenidos.
La Judicatura determinó que “la mayoría” de magistrados emitió “sentencias prefabricadas”. “No existió un análisis jurídico detallado, se manejaban las resoluciones de una manera mecanizada”, señala el Comité Evaluador.
Por ejemplo, los magistrados repetían la misma terminología, citaban a los mismos autores de libros o teorías de expertos en Derecho y tomaban de referencia las decisiones de otros jueces en todas sus sen
En contexto En el proceso de evaluación a la Corte Nacional, el Comité Evaluador se encargó de analizar la calidad de los fallos. También, de estudiar información sobre la legitimidad de los jueces, investigar su patrimonio y comprobar que no tengan bienes en paraísos fiscales.
tencias, pese a que “no existía relación con los casos”.
Uno de los evaluadores indicó, por ejemplo, que de una sentencia de 25 páginas solo en dos se establecía la resolución del juez o su dictamen.
El resto era una “copia textual” de fallos anteriores, en los que se detallaba el concepto de la casación, cómo debe aplicarse esa figura jurídica y se repetía el criterio de expertos en derecho sobre ese recurso.
“No es la tarea de un juez explicar qué es la casación, la tarea es resolver el caso”, señaló el coordinador del Comité Evaluador, Juan Carlos Mejía.
Además, sostuvo que “hay pronunciamientos judiciales “de 50 o 60 páginas, cuando podían ser cinco que contengan solo el razonamiento del juez”.
Según los evaluadores, este patrón se detectó en las seis salas existentes en la Corte Nacional: Penal, Contencioso Administrativo, Tributario, Civil, Laboral y de la Familia.
Estos hallazgos quedaron plasmados en un informe que el Comité entregó a la Judicatura, a inicios de octubre.
En ese documento se detalló que los formatos preestablecidos “llaman la atención” y recomiendan a la entidad iniciar una investigación interna.
Juan José Morillo, vocal de la Judicatura, señaló que los jueces incumplieron los parámetros de “razonabilidad, lógica y comprensibilidad, que son necesarios en las sentencias”.
Este Diario pidió un pronunciamiento a la Corte Nacional sobre estos hallazgos, pero la respuesta fue que no emitirán declaraciones ni se referirán a ese tema hasta que se conozca la lista de cuáles jueces permanecerán en sus cargos y quiénes dejarán sus funciones.
Está previsto que la próxima semana la Judicatura anuncie el listado definitivo, luego de que evacúen todos los pedidos planteados por los jueces.
Durante la evaluación hubo 12 magistrados que sí superaron el puntaje mínimo requerido. Según el Comité, en esos casos se evidenció en “menor grado la existencia de esos formatos en las sentencias”.
El pasado 28 de octubre, el jurista Roberto Salgado ya advirtió sobre la gravedad de este tema. En una entrevista con este Diario, dijo que se sacaban fallos “en forma matrizada y no en forma individualizada”. “Esta es una observación que hicimos, para que en un futuro los nuevos magistrados de la Corte Nacional ya no utilicen matrices, sino que individualicen cada caso de acuerdo con los fundamentos de hecho y de derecho que corresponda”.