Una guía con los novelistas recomendados de este 2019, según la crítica
El mercado literario de este año estuvo marcado por la publicación de nuevas novelas de autores de renombre
Con ‘Tiempos recios’ (Alfaguara), el peruano Mario Vargas Llosa volvió a su mejor versión como novelista. Lo hizo con una historia ambientada en la Guatemala de los años 50 y teniendo como protagonistas a expresidentes de esa nación, como Juan José Arévalo, Jacobo Árbenz y Carlos Castillo Armas y al dictador dominicano Rafael Trujillo Molina, el personaje principal de ‘La fiesta del Chivo’.
La Guatemala de ‘Tiempos recios’ es un país con una democracia frágil. Árbenz y Arévalo comparten un ideal: convertirla en una democracia como la de Estados Unidos, país al que admiran y que tienen como modelo. Para lograrlo, apuntan a la Reforma Agraria, una iniciativa que no es del agrado de la United Fruit, una empresa que convence al Gobierno de Estados Unidos que proyectos como este son una prueba del avance del comunismo en la región.
Al regreso exitoso del único escritor vivo del ‘boom’ latinoamericano, se suma el de Margaret Atwood. Este año, la escritora canadiense publicó ‘Los Testamentos’ (Salamandra), una novela cuya trama se desarrolla 15 años después del final de ‘El cuento de la criada’ y donde narra los testimonios la tía Lydia, que cuenta su propia historia, y dos jóvenes: una que fue criada en Gilead y una adolescente que escapó del régimen cuando aún era bebé.
El libro empieza con tres citas. Una de George Eliot sobre cómo se percibe a las mujeres; una de Vasili Grossman que hace referencia a los extremos en la derecha y la izquierda, y otra de Úrsula K. Le Guin, que dice que la libertad no es un regalo sino un trabajo duro.
Otro autor que volvió a publicar en el 2019 fue el británico Ian Mcewan, que lanzó ‘Máquinas como yo’, una novela distópica ambientada en
Londres de los años 80 del siglo XX. El protagonista de esta historia es Charlie, un hombre que compra un Adán, uno de los primeros humanos sintéticos creados por el científico Alan Turing, quien no se ha suicidado, sino que sigue vivo y dedicado al desarrollo de la inteligencia artificial.
Con la ayuda de Miranda, su amante, Charlie lo programa a su gusto. Pero Miranda oculta un terrible secreto que Adán, ese ser sintético sin las fisuras pero también sin los matices morales de los verdaderos humanos, acabará descubriendo.
La chilena Isabel Allende también volvió al mercado editorial con ‘Largo pétalo de mar’, una novela que tiene como protagonistas a Víctor Dalmau y a Roser Bruguera, quienes en plena Guerra Civil Española se ven obligados a abandonar Barcelona para exiliarse en Valparaíso.
En el ámbito local, uno de los regresos más esperados fue el de Leonardo Valencia, que publicó ‘La escalera de Bramante’ (Seix Barral). La novela entrelaza varias historias y paisajes ambientados en Europa y América Latina, entre ellas la de Landor, un pintor alemán, y Abu y Laura, dos artistas ecuatorianos.
A Landor le quedan pocos años de vida para concluir su ciclo de pinturas, con el que retorna -desde París y Barcelona- a su infancia destruida en la Segunda Guerra Mundial.
Abu, obsesionado por el color rojo, continúa en su deriva de artista errante mientras ayuda a su amigo Raúl, quien se destruye por el alcohol. Por su parte, Laura escapa de su entorno familiar para iniciar una vida de pesadilla entre Colombia, Ecuador y la selva amazónica, en la que todos terminarán implicados bajo la vigilancia de Taltibio y sus espías.