Economía chilena creció 1,1% en diciembre, pese a protestas
La actividad minera permitió obtener el resultado que causó sorpresa. El mercado pronosticaba una caída para ese mes.
Contra todo pronóstico y desafiando a las previsiones más agoreras, la economía chilena creció 1,1 % el pasado diciembre en relación al mismo período de 2018 y tras dos meses de intensas caídas debido al grave estallido social que vive el país suramericano.
El Banco Central publicó ayer el Índice Mensual de Actividad Económica (Imacec) de diciembre. El informe evidencia un incremento del este indicador del 0,6% en doce meses y del 3,5% con respecto a noviembre. En octubre, mes en el que estalló la crisis, la actividad se desplomó un 3,3%.
El crecimiento de diciembre, impulsado sobre todo por la minería, se sitúa muy por encima de lo que pronosticaba el mercado, que preveía una caída del 1 %.
“Vemos que la economía comienza a recuperar parte de lo perdido tras el 18-O (día que comenzaron las protestas). Cuando hay paz, las empresas pueden operar y la economía retoma el crecimiento”, dijo el ministro de Economía, Lucas Palacios.
El subsecretario de Hacienda, Francisco Moreno Guzmán, agregó por su parte en la misma red social que “diciembre fue un mes con menores hechos de violencia”, lo que permitió que “miles de mipymes volvieran a abrir sus puertas”, y aseguró que la cifra de crecimiento “revela que nuestra economía es especialmente resiliente”.
Chile vive desde hace más de tres meses la crisis más grave desde el fin de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-190), que ya ha cobrado la vida de al menos una treintena de personas y ha provocado más de 3 000 heridos.
Las protestas comenzaron como un llamamiento de los estudiantes a colarse en el metro de Santiago para protestar contra el aumento de la tarifa. Pero luego se convirtieron en una revuelta por un modelo económico más justo, que ha dejado también episodios de violencia extrema con saqueos, incendios, barricadas y destrucción de mobiliario público.
Pese a la buena cifra de diciembre, las protestas han hecho mella en la economía chilena, hasta el punto de que el Fondo Monetario Internacional (FMI) corrigió a la baja las previsiones de crecimiento para el 2020, que pasaron del 3% al 0,9%.