El Coe nacional fijó normas y pide coordinación a cabildos
El organismo estableció medidas generales y recomendaciones para otras entidades
El organismo estatal mantendrá el sistema de semaforización amarillo y verde como referencia. El Municipio de Quito definió cuatro medidas para reforzar el control desde mañana.
El mecanismo de la semaforización, que se aplicó en los 221 cantones durante la etapa del aislamiento, se mantendrá como una referencia para que los municipios continúen con los controles cuando finalice el estado de excepción.
Es decir, cada cabildo podrá mantener las reglas que implica el semáforo amarillo o verde, desde el 14 de septiembre. La eliminación del semáforo rojo está en análisis.
Así lo explicó ayer la ministra de Gobierno, María Paula Romo, durante una plenaria del Comité de Operaciones de Emergencia (COE) nacional a la que también asistió el presidente Lenín Moreno.
En este encuentro, las autoridades nacionales recordaron que desde el próximo domingo deja de tener vigencia el toque de queda y la prohibición de reuniones privadas.
El COE recordó que ni las autoridades nacionales ni las locales podrán restringir la libre circulación y asociación. Únicamente en el aspecto del tránsito, los municipios que tengan esa competencia podrán definir un nuevo esquema, como ya lo han hecho Quito, Guayaquil, Ibarra y otras urbes.
“Los municipios sí pueden regular los horarios de funcionamiento de los locales que se encuentran en su circunscripción”, señaló la ministra Romo.
Romo aclaró que para esta nueva etapa, el COE nacional no otorgará competencias a las diferentes entidades públicas, porque se mantendrá activo para asesorar a los gobiernos locales y manejar la emergencia a nivel estatal.
Si durante este tiempo de reactivación se presentan inconvenientes en las ciudades, Romo aclaró que el Presidente de la República tiene la potestad de emitir un nuevo estado de excepción, pero focalizado.
Además del tránsito y otras regulaciones, el COE nacional dio a conocer algunas de las medidas generales.
Los salvoconductos emitidos por este organismo serán válidos hasta el 31 de octubre. Para garantizar la movilidad de quienes los portan, el COE pidió a los gobiernos locales que garanticen su libre circulación, así como la movilización de los sectores que están en la primera línea de la emergencia y transitan sin restricciones.
Sobre este mismo tema, pidió a la Asociación de Municipalidades del Ecuador (AME) que se coordine un esquema estándar para la circulación, con el fin de no afectar el tránsito entre los cantones.
El transporte interprovincial seguirá con el 75% de aforo en las terminales que están habilitadas. Las fronteras terrestres seguirán cerradas.
El requisito de presentación de una prueba PCR negativa para ingresar al país, por cualquier vía, sigue vigente. Quienes no presenten estas pruebas -con justificación- deben cumplir con el tiempo de aislamiento preventivo obligatorio.
Rommel Salazar, secretario del COE nacional y director del Servicio de Gestión de Riesgos, informó que las clases presenciales continuarán suspendidas en todo el país. Mientras que para el sistema de educación superior, se permitirá la presentación de planes piloto para el retorno paulatino a las universidades.
También se mantendrá la prohibición de realizar espectáculos públicos, que no podrán ser autorizados por ninguna intendencia provincial.
Para la nueva etapa de la emergencia, las autoridades estatales encargadas de salud, educación, tránsito, seguridad y trabajo deberán continuar con la emisión de políticas públicas y normas regulatorias.
“Les pedimos a todas las instituciones que todas las medidas deben ser coordinadas para evitar que haya confusión en la población. Tenemos que facilitar la reactivación económica”, señaló Romo.
Durante los seis meses que estuvo vigente el estado de excepción por la emergencia sanitaria, los integrantes del COE nacional emitieron 100 protocolos para evitar la paralización total de actividades.