Una vivienda social enfocada en el compartir
Las salas comunes, las cocinas y las áreas recreativas son los centros de estos proyectos
Cada vez son más los proyectos que están uniendo a las personas y sugieren formas de vida más prácticas, comunitarias y cooperativas.
Esto puede ser a través del uso del espacio compartido como cocinas, pasillos, patios o actividades de participación y mantenimiento del complejo como la jardinería.
Un gran logro de estas nuevas formas de construir viviendas sociales es que se está brindando oportunidades para que las poblaciones desplazadas o con problemas económicos se ayuden entre sí.
De acuerdo con el portal Plataforma Arquitectura, el mundo todavía se dirige hacia una urbanización densa con más personas que se trasladan a las ciudades y requieren viviendas seguras y saludables.
De ahí la necesidad de que esos mismos espacios de asentamiento estén bien concebidos y brinden condiciones de vida dignas. Con ello se puede promover el desarrollo de comunidades unidas entre personas de diferentes regiones y orígenes.
En una recopilación realizada por el portal, se evidencia cómo algunos arquitectos están planteando el construir viviendas sociales bajo esos conceptos, más empáticos, solidarios y enfocados en el habitante y su comunidad.
Uno de ellos es las Residencias AYA por el Studio Twenty Seven Architecture y Leo A Daly JV, en Washington, Estados Unidos. Según la descripción de la firma, este proyecto consta de siete a 10 unidades de vivienda por piso con habitaciones comunitarias, instalaciones de lavandería, baños privados y públicos en cada piso, entre otros.
Además, en la obra se destacan las áreas de juego al aire libre en cada nivel. También el punto principal fue la participación del vecindario desde el diseño de este lugar. Ellos aportaron con sus ideas sobre cómo querían los espacios y qué necesitaban.
Otra muestra es el proyecto de vivienda social Pemulung House del estudio IBUKU, en Indonesia. Ubicado en Denpasar, se trata de un conjunto de 14 unidades habitacionales de 18 metros cuadrados.
Se construyó como pedido de una empresa dedicada al reciclaje para impulsar la actividad y mejorar las condiciones de los trabajadores. Las unidades tienen áreas de baño, almacenamiento, cocina y áreas comunes, para permitir el encuentro y el trabajo de sus habitantes.
El Refugio para migrantes y viajeros, por la firma Atelier
Rita, es un ejemplo de cómo generar espacios comunes de vivienda mucho más dignos. Este proyecto fue encargado por la ONG Emmaüs Solidarité, como parte del plan de proporcionar una solución a los refugiados que llegan de forma constante. Se desarrolló en
Ivry-sur-seine, Francia.
El refugio de emergencia está hecho para 400 personas (350 refugiados y 50 comunidades romaníes).
Las familias, a veces con niños, y las mujeres aisladas se alojan durante seis meses como máximo.