A 20 años de la partida de don justo Campaña Zúñiga, un grande dentro de la historia de la filatelia ecuatoriana
Las personas verdaderamente mueren cuando el último de sus seres queridos o amigos lo deja de recordar en esta vida.
En el caso de los filatelistas, sus nombres son recordados por la colección que tuvieron, o por alguna pieza notable de su colección. En algunos casos solamente son relatos de alguien que tuvo la suerte de ver su colección en forma privada, en una exposición, y en forma mas reciente ver imágenes de sus tesoros en una subasta internacional.
Sin embargo hay un grupo muy especial de filatelistas que teniendo vocación de investigar y conocer mas sobre determinado tema, tuvieron la feliz iniciativa de compartir sus hallazgos a través de la publicación en una revista.
Cuando pasan los años y nuevas generaciones de filatelistas llegan, la mejor manera de aprender es consultar lo que se ha escrito sobre determinado tema, y es entonces en que un filatelista que aparentemente ha sido olvidado vuelve a la vida.
En este año la feliz iniciativa de Mi Oficina Philatelic Society (Youtube) nos ha permitido conocer mejor a los coleccionistas, por su colecciones, y por sobretodo sobre el conocimiento que gira alrededor de su colección. Se ha visto investigación en varias de estas conferencias, y en algunas ocasiones ha sido nombrado en ellas Don Justo Campaña, a quien principalmente se lo recuerda como comerciante de estampillas, pero que tuvo la gran inspiración de escribir sobre las estampillas de Ecuador. Posiblemente no se recuerda ninguna colección de Don Justo, pero sus artículos son testigo de su gran amor por esta linda afición.
Este año Don Justo cumple veinte años de su partida de este mundo. Se nos fue el 2 de octubre del 2.000. Nos dejó una hoja de vida extensa con muchas experiencias , nos dejó múltiples artículos de gran valor histórico y filatélico..
Cada visita a la casa de Don Justo tenía por seguro regresar a casa con un nuevo tesoro para nuestra colección de estampillas, pero por sobretodo regresábamos con grandes anécdotas que luego se han transformado en grandes recuerdos a quienes tuvimos la suerte de visitarlo en su estudio filatélico situado en su domicilio en la Ciudadela Nueve de Octubre en el sur de Guayaquil.