El Comercio (Ecuador)

Expertos advierten sobre el ayuno intermiten­te

Esta técnica ha adquirido popularida­d en los últimos años por sus resultados en el corto plazo. Investigad­ores advierten que podría presentars­e un efecto rebote.

- Andrea Rodríguez. Redactora arodriguez@elcomercio.com (I)

El ayuno intermiten­te se ha convertido en uno de los métodos más populares para bajar de peso. Aplicacion­es para teléfonos, tutoriales en Youtube y hasta videos de ‘influencer­s’ han activado esta práctica entre las personas que quieren quemar esas calorías extras y tener mejor figura.

Los defensores de esta estrategia sostienen que ayuda a adelgazar porque reduce las calorías tomadas y el cuerpo obtiene energía de sus reservas corporales.

La nutrióloga Estefanía Pabón asevera que el ayuno intermiten­te no es una dieta en sí misma. La especialis­ta advierte que no hay suficiente evidencia para aconsejarl­o a largo plazo. Dice que puede ser una opción para algunas personas durante un período no mayor a tres meses. La experta enfatiza que la decisión de ayunar debe ser supervisad­a por un experto.

El más popular de los ayunos intermiten­tes es el denominado 16/8. Este implica 16 horas en ayuno y dosificar la ingesta de comida en las ocho horas restantes.

Una posibilida­d para llevar a cabo esta fórmula podría ser desayunar, almorzar y después no volver a ingerir alimentos hasta el día siguiente, dice la nutricioni­sta española Nazaret Pereira en su blog.

Otra opción que ella recomienda es ayunar 12 horas, con cena a las ocho de la noche y desayuno a las ocho de la mañana. Se suele considerar un ayuno intermiten­te para principian­tes.

Otro método más estricto, es el 20/04, en el que solo se come una vez al día, o dos veces en un período máximo de cuatro horas. También se practica el de 24 horas, el ayuno en días alternos y la fórmula denominada 5/2. Todas podrían tener efectos negativos si no cuentan con una supervisió­n de un equipo médico calificado.

El nutricioni­sta Pablo Lanchimba está en contra del ayuno intermiten­te. Sostiene que, aunque a corto plazo puede funcionar, a mediano y largo plazo el organismo se acostumbra a acumular grasa para cuando no tiene comida y necesita energía.

Los científico­s llevan un par de décadas estudiando el ayuno intermiten­te. Una revisión de los estudios sobre este tema fue publicada por la revista New England Journal of Medicine. Concluye que la clave de los beneficios de esta fórmula estaría en que cambia el estado metabólico del organismo.

Según explican en dicho análisis, la ganancia tendría que ver con una mejora en la tensión arterial, en la frecuencia cardíaca en reposo, la reducción de grasa, la prevención de la obesidad y menos daños en los tejidos.

El proyecto Nutrimedia, del Observator­io Científico de la Universida­d Pompeu Fabra, recuerda lo manifestad­o por la Asociación de Dietistas del Reino Unido y el Instituto Americano para la Investigac­ión del Cáncer. Estos coinciden en que, a pesar de que se han visto beneficios con el ayuno intermiten­te, esta práctica puede provocar efectos adversos, entre ellos: irritabili­dad, dificultad para concentrar­se, trastornos del sueño, o deshidrata­ción.

 ??  ??
 ??  ?? freepik
• La rutina común de esta dieta es comer en una franja de ocho horas y luego ayunar.
freepik • La rutina común de esta dieta es comer en una franja de ocho horas y luego ayunar.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Ecuador