El VAR y la liga ‘top’ de Ecuador
La utilización del VAR en el derbi del Astillero ha causado una intensa controversia en la Ligapro; sí, una de las tantas que ponen en claro que nuestro campeonato de Serie A no es tan ‘top’ como se pregona por ahí.
A primera vista, no habría nada de malo en que un equipo ponga el dinero para que se contrate el VAR, sobre todo si quiere garantizarse que el arbitraje sea el idóneo en un año con muchos errores por parte de los jueces centrales o de línea. Después de todo, siempre hubo la posibilidad de traer árbitros extranjeros y el club que los pedía corría con los gastos.
El problema, sin embargo, es que no es lo mismo contratar árbitros de otro país que utilizar un sistema como el VAR que NO PUEDE ser instalado en todos los estadios del país. No es un tema de poner el dinero, sino de justicia.
Lamentablemente, el VAR requiere de un avanzado sistema de video y cámaras, además de conexión de audio con los jueces. En otras palabras, necesita una infraestructura. Hoy solamente es posible instalarlo en los estadios Olímpico Atahualpa, Capwell, Monumental, Cristian Benítez y Rodrigo Paz Delgado. Ecuador tampoco cuenta con el número de árbitros debidamente capacitados para la utilización del sistema.
Por eso, al permitir que el VAR se aplique en un cotejo que no sea la final, se ha dado paso a una justicia deportiva diferenciada, lo cual es inaceptable y envía un mensaje peligroso. Pero bueno, son cosas que pasan en las ligas ‘top’ como la nuestra, donde la emoción siempre le gana a la razón.