9 de 26 locales del Mercado del Río cerraron
Las medidas de restricción para el acceso al Malecón 2000 también afecta el flujo de clientes
Wilson Andrade, socio del restaurante Balandra, ha visto cerrar al menos siete locales en el Mercado del Río desde que empezó la pandemia. Es el complejo gastronómico del Malecón de Guayaquil que ofrece su vista al río Guayas.
La mayoría de los negocios desaparecidos son marcas sin la suficiente tradición o apalancamiento para sobrevivir a la crisis económica derivada de la pandemia, según Andrade.
Balandra, que tiene dos restaurantes en el lugar, tuvo que recurrir a la venta de almuerzos -a domicilio y en el sitio- a un precio más accesible que sus platos de mariscos a la carta.
Los ingresos bajaron y ahora equivalen a un 30% de las ventas que registraba antes de la pandemia. Además, los arriendos de locales del Mercado se ajustan de acuerdo a la facturación de cada mes. En el resto de comercios y restaurantes del Malecón -más de 150 locales- el descuento es del 50% en los arriendos.
El Municipio dispuso desde el 3 de enero un nuevo cierre, por 20 días, de camineras y zonas de entretenimiento del Malecón, debido a un incremento de contagios y el riesgo de la nueva variante del covid-19.
Las áreas comerciales siguen abiertas, pero la medida reduce la afluencia de clientes. Nicolás Romero Ordeñana, director del Mercado del Río, ha contado desde marzo cinco de estos cierres temporales de las áreas públicas del Malecón, lo que les resta competitividad a los negocios.
El Mercado del Río fue inaugurado el 25 de octubre del 2018 como una potencia gastronómica y turística de la ciudad. Recibía una 40 000 personas al día, en promedio, antes de la pandemia. Ahora, cuando están abiertas las áreas públicas del Malecón, los clientes llegan al 45% de esa cifra. Pero, con la orden de cerrar las camineras, la cantidad cae a un 20 % o 25 %.
“Sin duda que nos afecta tremendamente, estuviéramos mucho más activados todos los negocios si el libre acceso al Malecón no se restringiera y reabriera intermitentemente”, dijo Romero. Él cuestiona la efectividad de prohibir el acceso a lugares abiertos como parques y malecones, cuando sitios como la vecina zona comercial de la Bahía luce abarrotada.
Los descuentos mensuales en arriendos en el complejo gastronómico son fluctuantes y alcanzaron hasta el 80% en julio, cuando los locales reabrieron al público. En los meses de cierre no se cobraron arriendos.
En el Mercado del Río, nueve de sus 26 negocios desaparecieron en la pandemia. Pero la administración tiene un proyecto para reabrir seis restaurantes icónicos de la ciudad, que en algún momento cerraron sus puertas, adelantó Romero. Se prevé la apertura desde finales de enero y tienen el auspiciado de una bebida.
El Malecón cuenta además con 138 locales en su centro comercial y dos patios de comidas, entre otros restaurantes y cafeterías. Los accesos a los negocios están permitidos, pero el resto del paseo turístico de 2,5 km está cerrado. El horario es de lunes a domingo de 10:00 a 19:00.
La Dirección de la Fundación Malecón 2000, que administra el icónico lugar, informó que los comercios estuvieron cerrados en su mayoría hasta el 22 de mayo del 2020.
En el período de cierre y cuando abrieron sus puertas se manejó un acuerdo con los concesionarios, para otorgarles un descuento del 50% de arriendos, facilidades de pago en el canon y servicios, lo cual sigue hasta ahora, según la Fundación.