Autoridades detectan fiestas y bares abiertos
En los operativos se registraron eventos en el norte, centro y sur de la ciudad
La Intendencia de Policía y la Agencia Metropolitana de Control (AMC) ejecutaron operativos en las nueve administraciones zonales durante el fin de semana. Como resultado se clausuraron fiestas clandestinas, locales que operaban con más del aforo permitido y sin medidas de bioseguridad y se sancionaron a personas por mal uso del espacio público.
El viernes en la noche se clausuró una cancha en Calacalí, en el noroccidente de la ciudad. Según informó la AMC, en el lugar se encontraban 150 personas sin distanciamiento social. Durante los operativos nocturnos se encontró una vivienda en El Quinche, donde se expendía licor sin permiso. En este caso se inició el proceso sancionador a los responsables.
En el mismo lugar, se encontró a un grupo de personas que libaban en la calle, que fueron desalojados y sancionados.
Por otro lado, tras una denuncia por redes sociales, la tarde del sábado se ejecutó un operativo en el Parque Inglés en el norte. Al lugar acudieron 20 efectivos de la Policía, 20 agentes de control y seis funcionarios de la AMC para desalojar a más de 800 ciudadanos que estaban aglomerados. Se recordó que los deportes de contacto (como fútbol y básquet) no están permitidos.
La noche del sábado, en cambio, las entidades de control clausuraron algunos eventos. Un de ellos en Vista Hermosa, en el sector de la Libertad (sur), donde había más de 60 personas. También se suspendió una reunión en Llano Chico con más de 40 personas. La misma se desarrollaba en un predio sin distanciamiento ni medidas de bioseguridad.
Por su parte, la Intendencia de Policía de Pichincha informó que suspendieron un evento no permitido en el sector La Ecuatoriana, en el sur. En el lugar se registró a 200 ciudadanos en aglomeración.
De igual manera se clausuraron establecimientos que no contaban con permisos de funcionamiento. Uno fue en La Mariscal. Durante la noche del sábado se verificó que un bar estaba funcionando pese a que no hay autorización todavía para que este tipo de locales operen debido a la emergencia sanitaria. En lugar se constató que las personas no respetaban el distanciamiento ni el uso de mascarilla.
Se recordó que para quienes expenden y consumen alcohol en la vía pública, la Ordenanza Metropolitana 151 establece la aplicación de una multa del cincuenta por ciento (50%) del salario básico, es decir, USD 200. De acuerdo con el artículo 4 del documento la reincidencia se sancionará con el doble de la multa previamente establecida.
En el caso de no acatar el uso obligatorio de mascarilla en el espacio público la multa es del 25% de un salario básico (USD 100) y el doble si es reincidente, tanto para transeúntes como para conductores.