Guayas registra las muertes más altas en los últimos 11 meses
El incremento se atribuye a la variante británica y a la de Nueva York, que son comunitarias, más contagiosas y mortales.
El enorme atomizador remolcado por un tractor ha vuelto a recorrer las calles del cantón Milagro, un año después de la primera ola del covid-19. El zumbido del motor que rocía amonio cuaternario recuerda a los tiempos más aciagos de la pandemia.
“La segunda ola es real y ya está aquí”, advierte el alcalde de Milagro, Francisco Asán. Según los datos del Comité de Operaciones de Emergencia (COE) cantonal, de cada 100 pruebas de hisopado de covid, 45 salen positivas.
El panteón municipal de Milagro registraba en la prepandemia 45 muertes mensuales, en este momento pasan las 100 al mes, apunta Asán. Él atribuye esta ola a una mayor transmisibilidad del virus y al relajamiento de la población tras 13 meses de pandemia.
Las 12 camas de las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) de los dos hospitales de Milagro llevan meses al 100%. La vacunación aún avanza lentamente: entre 700 y 1 000 vacunas semanales, para una población de 200 000 habitantes.
Guayas registró en marzo el más alto número de defunciones de los últimos 11 meses, según el Registro Civil y la proyección de abril es un tanto mayor (ver gráfico). Se trata del tercer mes más fatídico en toda la pandemia, solo superado por marzo y abril del 2020.
Fernando Espinoza, director del Centro de Investigaciones de la Universidad de Especialidades Espíritu Santo (UEES), le atribuye el aumento a las nuevas variantes que se propagan más rápidamente y causan mayor letalidad.
En la zona de influencia del gran Guayaquil, cantones vecinos del Puerto Principal, son comunitarias desde enero las variantes del covid-19 provenientes del Reino Unido (o inglesa) y la de Nueva York, ambas con mayor índice de contagios y mortalidad, explicó.
Una persona contagiada con la variante original podía infectar a una o dos más, pero con los nuevos linajes ese mismo infectado puede contagiar a cuatro o cinco personas.
Explica que estas variantes se están convirtiendo en predominantes en Guayas, con respecto al coronavirus original. “Un poco más del 50% de los virus secuenciados corresponden a las nuevas variantes. Hemos secuenciado más de 180 muestras de virus, a nuestra capacidad”, dice Espinoza.
Él cree que es crucial estudiar muchas más muestras genéticas a escala nacional, en diferentes ciudades, para vigilar el avance y comportamiento de las variantes. Ecuador ha realizado unas 350 secuenciaciones frente a las 300 000 del Reino Unido, dice.
El número de casos de covid subió un 62,22 % en el nuevo año en Guayaquil, según el MSP. La alcaldesa Cynthia Viteri informó que el promedio de muertes diarias subió de 30 a 33, lo que recuerda “a los peores días de la pandemia”.
Entre los cantones con más infectados acumulados en el 2021, en Guayas, está Naranjal, que en tres meses y medio de este año acumula más del triple de los casos que tenía hasta diciembre del 2020.
En Durán el incremento de casos en lo que va del 2021 es de 73,29% en relación con los registrados a lo largo de 10 meses del 2020 en el cantón.
Jaime Ruiz, jefe de la Dirección de Salud de Durán, reconoció que entre marzo y lo que va de abril la localidad registró “una alta tasa de infestación” y un repunte de muertes. Pero aún lejano al pico de contagios de abril del 2020.
El Cabildo se alineó con el COE nacional, que dispuso restringir la circulación vehicular nocturna, de 20:00 a 05:00 entre viernes y domingos, para evitar -según Ruizinteracciones sociales por actividades de diversión y ocio.
Los hospitales del Ministerio de Salud Pública registran el 97 % de ocupación de camas UCI en Guayas.
Fernando Flores, presidente de Camposantos Parque de la Paz, que cuenta con cuatro cementerios entre Durán, La Aurora (Daule) y Guayaquil, explicó que el grupo sepultó en marzo 359 cuerpos y la proyección de abril es cerrar arriba de los 410. Las cifras son muy superiores de los 250 de diciembre del 2020.
Pero según Flores, el número de fallecidos no tiene la capacidad de colapsar el sistema funerario, como ocurrió el año pasado, cuando se excedió la operación de los cementerios.
“Nosotros no tenemos problema con capacidad o espacio. En la primera ola atendimos a clientes particulares y a la Fuerza de Tarea Conjunta, que levantó fallecidos de casas y hospitales”, recuerda. El plan de contingencia de estos camposantos se centra en estar preparados para activar nuevo personal operativo o trasladarlo si es requerido.