“HEMOS INCORPORADO LA AMENAZA BIOLÓGICA EN EL PLAN DE RIESGOS”
ENTREVISTA. LA PANDEMIA SE INCLUYE EN EL PLAN, JUNTO CON LAS AMENAZAS DE INUNDACIONES, DESLIZAMIENTOS, TERREMOTO, TSUNAMI Y SEQUÍA.
La pandemia pasó a ser parte del plan integral de riesgos, como una amenaza biológica, y ya se incluye en el Plan Portoviejo 2035.
Julio Celorio, director municipal de Gestión de Riesgos, habla de los componentes del plan y de los avances que tiene la institución para que la población esté preparada para actuar ante las eventualidades.
Al ser la pandemia una amenaza ¿se la está considerando en el plan de gestión de riesgos del cantón?
La gestión de riesgos en el Municipio de Portoviejo forma parte de una de las transversalidades dentro del Plan Portoviejo 2035. Al ser parte del plan, el municipio ha venido trabajando, con apoyo tanto de la Agencia de Cooperación Japonesa (JICA), de la Cooperación Técnica Alemana (GIZ) y de la Comisión Europea, en la definición de un plan multiamenazas. Ese plan contempla efectivamente, hasta antes de la pandemia, las amenazas más recurrentes que tiene el cantón: inundaciones, deslizamientos, pero también las de mayor impacto que pudiese tener, como el tema sísmico, de tsunami y de déficit hídrico o de sequías. Ahora con la pandemia, en la experiencia que ha ido adquiriendo la institución en términos de organización como de prevención, se incorpora también la amenaza biológica, siendo uno de los temas que a medida que se va aprendiendo más de la evolución y el tratamiento del virus, se incorpora cómo abordar eventos como estos con un mayor control en los centros epidemiológicos.
¿Cómo se complementa el plan de riesgos?
El plan tiene varias aristas, primero se asienta en una base de información de los riesgos. Me atrevo a decir, por experiencia, que el de Portoviejo es uno de los pocos municipios que tiene información y estudios a nivel de detalle. Es así como se cuenta con estudios de inundación, de deslizamientos, movimientos en masa, tanto del área urbana como de la zona rural del cantón. Contamos con el estudio de microzonificación sísmica, que se lo hizo después del terremoto, y también el estudio de inundación por tsunami, que a través del proyecto de ciudades resilientes que se ejecuta con JICA, el Inocar levantó el mapa de inundación de tsunamis, basado en una modelación de un terremoto similar al de 1906 ocurrido en Esmeraldas. Adicionalmente se ha venido incorporando todo el ejercicio de escenarios de riesgos que se ha desarrollado en el tema del Covid a través de los testeos que el municipio ha venido generando frecuentemente, desde que se inició la emergencia, para tener una base de información sobre cómo se comporta el virus a nivel territorial, puesto en cartografías.
También hay componentes que necesitan una inversión mayor…
Otros riesgos requieren de una inversión súper fuerte. Por ejemplo, el tratamiento de los flujos de lodo de la ciudad requiere una inversión súper alta con relación a los interceptores de quebrada, esa es la solución definitiva, sin embarinversión, go, como acciones de mitigación estamos haciendo todos los años trabajos de limpieza y mantenimiento de los muros de gaviones en quebradas.
¿Qué se planifica para evitar las inundaciones?
El control de inundaciones del río Portoviejo requiere de obras hidráulicas de mayor lograr que el excedente de agua que se genera en las temporadas invernales se la derive a otros sitios donde no afecte y más bien aprovecharlo para riego. Está en la proyección que está planteada hasta el 2035.
¿Cómo mantener esta preparación en tiempos de pandemia y frente a la cercanía del invierno?
Como parte del plan de acción invernal hemos venido trabajando más bien en el tema preventivo. En el tema de preparación se inicia con una campaña de sensibilización en este mes; tenemos un ejercicio también con las zonas rurales en el que logramos establecer una red de personas de las comunidades asentadas en las riberas del río, que nos alertarían sobre una creciente y tenemos establecido como un sistema de alerta temprana comunitario. Esto se complementa con un trabajo de capacitación a las personas que forman parte de esta red, con la finalidad de que puedan llevar un mensaje a las comunidades. Eso en el tema preinvernal. Sin embargo, sí se han venido realizando actividades de capacitación a través de plataformas virtuales. Tenemos un proyecto con la GIZ en San Pablo: tenemos el proyecto de apoyo con la Cooperación Japonesa en el que se ha venido trabajando desde inicio de la emergencia con la población de Crucita, con las comunidades más vulnerables. El ejercicio de capacitación es permanente.