COMERCIO PISCINERO
EMPIEZA A MOVERSE EN PORTOVIEJO
LA INCERTIDUMBRE EN LAS DISPOSICIONES Y PERMISOS GENERA DECEPCIÓN EN LOS COMERCIANTES QUE NO INVIERTEN”.
DIOCLES VALERIANO PDTE. CÁMARA COMERCIO
Cada año, desde los primeros días de enero, el empresario Giovanni Bravo surtía su almacén “El Panameño” con ropa y artículos de playa.
Recuerda que procuraba tener las últimas tendencias de trajes de baño, sobre todo de mujeres y niños, pues reconoció que los manabitas disfrutan mucho de la temporada y en carnaval ha sido costumbre ir a la playa, entonces era el primer buen golpe del comercio en el año.
Sin embargo, lamentó que este 2021 la situación ha cambiado debido a la pandemia del COVID y pocos se animan a invertir, pues además del incremento de los contagios y la crisis económica, se suman los cambios de las disposiciones del COE a pocos días de los feriados, como sucedió en Navidad y fin de año.
En definitiva, en su caso la inversión que realizó fue entre el 40 y 50 por ciento menos de lo que hizo en el 2020. “Antes hacíamos proyecciones de compras con dos meses de anticipación, pero ahora eso no se puede. Todo dependerá de los casos de coronavirus y de lo que decida el COE”, expresó.
Con él coincide Luis Laz, quien vende pistolas de agua. Dijo que en el 2020 vendió cerca de 200 unidades, pero ahora apunta a adquirir unas 100 que le llegarán el fin de semana.
> TEMOR.
Diocles Valeriano, presidente de la Cámara de Comercio, mencionó que recopilan información sobre las afectaciones económicas que habrá en el feriado de carnaval que se aproxima.
Dijo que en esta ocasión la inversión para adquirir productos playeros ha caído drásticamente. De acuerdo a lo que le dicen los agremiados, se sitúa de 65 a 70 por ciento menos que el año pasado.
Agregó que ante “las indecisiones de las autoridades de control” pocos se arriesgan a invertir, ya que estiman que las familias no harán muchos planes para moverse a las playas y esperarán hasta última hora para saber si hay permiso de movilidad, si reservan hoteles o si comprarán ropa para ir a la moda.
> POSITIVO.
Con otra visión, en el bazar ‘El Regalo’ ven en la situación una oportunidad.
José Mera, gerente, dijo que es claro que las familias se van a quedar en casa y para no perder la costumbre de bañarse o mojarse, van a necesitar piscinas inflables o móviles que las colocan en los patios y portales. Ellos desde fin de año adquirieron cerca de mil unidades, entre esas 300 grandes con estructura plástica o metálica, que son ideales para familias grandes, porque, dijo, allí entran sin problema unas seis personas.
Mencionaron que hay piscinas de todos los tamaños, que van desde $4 para los pequeñitos hasta $400 las que incluyen bomba para hacer circular el agua. Dijeron que las ventas ya se mueven y esperan que desde este fin de semana las personas se decidan a hacer compras para la temporada.