Nacer niña
Nunca me he identificado como feminista, soy humanista; y me encantan los triunfos y logros de cada persona. Y sí, me intranquilizo mucho cuando las mujeres se sienten inferiores o son maltratadas por diferentes motivos. La historia nos ha contado cómo a través de los años han existido abusos a mujeres y a personas consideradas inferiores, sin embargo, aún en pleno siglo XXI muchos países tratan a las mujeres como objetos. Nuestras niñas, las ecuatorianas, a pesar de las estadísticas y dificultades, tienen herramientas para ser grandes profesionales y mejores seres humanos. Y somos los padres los llamados a darles una guía para que escojan el mejor camino. Lo mismo pasa con los varones, pero en ciertos países nacer niña es sinónimo de tristeza, pérdida o mala suerte. No dejemos que nuestras niñas sean objetos de nadie, sino manos que transformen el mundo para bien. Me da mucha tristeza leer o ver historias de generaciones completas de mujeres sometidas en pleno año 2022. Entre los países donde las mujeres enfrentan más desagravios están Afganistán, Guatemala, Congo, India, Irak, Mali, Pakistán, Somalia, Sudán, Chad. Un denominador común con esos países son los casos de violencia, allá seguramente con estadísticas más contundentes contra las mujeres. A lo que se suman casos de mutilación genital, matrimonios infantiles que a veces están prohibidos por los gobiernos, pero son prácticas que no han desaparecido en aldeas remotas. Obviamente hay abusos sexuales, condiciones de vida marginales, enfermedades de transmisión sexual y múltiples prohibiciones. Es tan triste escuchar, por ejemplo, que en algunas regiones de India dar a luz a una niña es sinónimo de desagrado. Y con el tiempo y la aparición de los ecógrafos se pasó de botar a las recién nacidas a abortarlas. Tanto se ha dado esta situación, que hay pueblos donde hay pocas mujeres y los hombres no encuentran esposas; lo que suena paradójico. No las quieren, pero las necesitan. Vender mujeres para ser esposas es un negociado. El que compra seguramente tendrá descendencia, no perderá su apellido y tendrá quien le atienda el hogar. Hay organizaciones que capacitan a las mujeres para trabajar por su futuro. Una de estas se llama Shanti Bhavan, una escuela que cobija a la clase más desprotegida de India. Formemos a nuestros hijos para que exista respeto mutuo, que tengan el mismo cariño, oportunidades y que puedan elegir libremente el campo en el que quieren multiplicar y compartir su conocimiento.
“UN GOBERNANTE SABIO LO PIENSA DOS VECES ANTES DE EJERCER VIOLENCIA EN CONTRA DE ALGUIEN PORQUE NO APRUEBA LO QUE DICE”
SIR TERRY PRATCHETT, ESCRITOR INGLÉS