El Día del Niño
El Día del Niño es una celebración dedicada a los niños y niñas en muchos países alrededor del mundo. Esta fecha busca reconocer y honrar sus derechos, así como fomentar su bienestar y felicidad. Es una oportunidad para resaltar la importancia de la infancia y promover la protección de los derechos de los niños, incluyendo el derecho a la educación, a la salud, a la alimentación adecuada, a la recreación, entre otros. Lamentablemente no todos los derechos se cumplen, los niños no prosperan, y este día debería llevarnos a reflexionar en lugar de celebrar. En América Latina y el Caribe, aproximadamente 27,5 niños por cada mil nacidos vivos mueren antes de los cinco años. Se estima que aproximadamente 14 millones de niños menores de cinco años sufren de desnutrición crónica, ocasionando un retraso en el desarrollo físico y cognitivo.
Existen brechas significativas en el acceso y la calidad de la educación entre diferentes grupos socioeconómicos. Los niños de familias de bajos ingresos, zonas rurales y comunidades indígenas o afrodescendientes a menudo enfrentan mayores desafíos para acceder a una educación de calidad. Aproximadamente 10,5 millones de niños entre 5 y 17 años están involucrados en el trabajo infantil. El acceso a la atención médica ha mejorado, pero todavía existen disparidades significativas. Las áreas rurales y las comunidades de bajos recursos enfrentan dificultades para acceder a servicios de salud de calidad. La inmunización es fundamental para prevenir enfermedades prevenibles mediante vacunas. En la región, se han realizado esfuerzos para mejorar las tasas de vacunación, pero aún hay desafíos en términos de acceso equitativo y cobertura universal. La salud mental infantil es un tema emergente en América Latina. Los trastornos como la depresión, la ansiedad y el estrés traumático pueden afectar negativamente el desarrollo y el bienestar de los niños.
Definitivamente este día brinda la oportunidad de reflexionar sobre la necesidad de crear un entorno seguro y propicio para el crecimiento y desarrollo de los más jóvenes. Hay que recordar la responsabilidad que tenemos como sociedad de garantizar su protección.
En este día, es fundamental que cada uno de nosotros se comprometa a hacer una diferencia en la vida de los niños. La celebración del Día del Niño no se trata solo de regalos y entretenimiento, sino de recordar que cada niño merece ser amado, respetado y cuidado. Los niños son el corazón y el alma de nuestra sociedad.
“Lo único que todos los niños tienen en común son sus derechos. Todo niño tiene derecho a sobrevivir y prosperar, a recibir una educación, a no ser objeto de violencia y abusos, a participar y a ser escuchado” (Ban Ki-moon, secretario general de Naciones Unidas, 2016).
“SI NO PELEAS PARA ACABAR CON LA CORRUPCIÓN Y LA PODREDUMBRE, ACABARÁS FORMANDO PARTE DE ELLA”