Seguirá acéfala la Contraloría
Las Instituciones se apuntan unas a otras, pero ninguna da una solución al entrampamiento legal.
Quito.- La renuncia de Pablo Celi no solucionó la acefalía en la que se encuentra la Contraloría desde hace casi tres meses, cuando su principal autoridad fue a prisión investigado por presunto delito de delincuencia organizada.
El Consejo de Participación Ciudadana y Control Social tiene la responsabilidad de nombrar un contralor definitivo; pero mientras organiza el concurso, que no durará menos de seis meses, pide que la Asamblea o la Corte Constitucional le deje designar un reemplazo, lo que no es legal, por lo que no será posible.
Advierten que el reemplazo nombrado por Celi antes de renunciar no es legal. La Contraloría, en este momento, no tiene ninguna cabeza que la dirija.
Pablo Celi renunció al cargo, pero esto no soluciona la acefalía en la que se encuentra la Contraloría, pues expertos y autoridades coinciden en que el reemplazo que el propio Celi nombró no es legal.
Entonces, ¿quién dirige la institución en este momento? En esto también hay coincidencias: aseguran que nadie, y así permanecerá por los próximos seis meses, mientras se nombra a un remplazo definitivo.
Mientras, instituciones que podrían cambiar esta situación se señalan mutuamente, pero ninguna toma una decisión definitiva, en gran parte, porque legalmente no pueden, pues hay vacíos legales y un bloqueo que el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS) Transitorio dejó establecido para que Celi no sea cambiado hasta que la Contraloría no sea reformada.
Desde hace casi tres meses, cuando Celi fue ingresado a la Cárcel 4 de Quito investigado por el delito de presunta delincuencia organizada, el CPCCS ha buscado vías para nombrar un sucesor temporal, mientras se realiza el concurso, en el cual tampoco ha avanzado, pues todavía no cuenta con un reglamento definitivo.
La primera opción del CPCCS fue consultar al procurador Íñigo Salvador sobre la posibilidad de nombrar un sucesor temporal, pero la respuesta fue negativa, pues la Ley de la Contraloría no establece esta opción. La segunda vía fue pedir a la Asamblea Nacional que reforme la norma para que una designación provisional sea posible.
Sin embargo, para el legislador Alejandro Jaramillo la solución a este dilema no está en manos de la Asamblea Nacional. Airmó que “la pelota ha estado siempre en la cancha de la CPCCS”, que desde hace tres meses debió iniciar el concurso para reemplazar a Celi y no lo ha hecho, por lo que ahora debería acelerarlo, pero tampoco lo hace, y somete a la socialización el reglamento del concurso, cuando la ley no lo exige.
“La Asamblea no puede y no debe definir una salida a una situación que le corresponde exclusivamente al CPCCS, que ha pedido una salida a la Legislatura para ellos resguardarse políticamente ante un posible enjuiciamiento político. Además, la Asamblea puede generar una ley interpretativa, complementaria o reformatoria, pero no es retroactiva, es a lo venidero y no resolvería el problema actual”, explicó Jaramillo.
El concurso
El constitucionalista Ismael Quintana coincide con el legislador, quien además puntualizó que una ley interpretativa, como la que el CPCCS quiere que elabore la Asamblea, solo cabe cuando un tema no está claro, pero no es el caso, pues en realidad no hay una norma que les permita nombrar un remplazo temporal y se necesita elaborarla, lo cual llevaría por lo menos seis meses.
“Tenemos un problema: hay una acefalía en la Contraloría y eso resuelve por la vía del concurso, pero se demoran haciendo un reglamento, cuando podrían adaptar un reglamento anterior. Además pierden el tiempo consultando a la Corte Constitucional un tema que es obvio y que depende de la voluntad de los siete consejeros, de que se pongan a trabajar, en lugar de estarle dando al país largas y pretextos. Lo que quieren es nombrar un contralor temporal a dedo, meter una autoridad por la ventana”, dijo Quintana.
Por su parte Darwin Seraquive, secretario del CPCCS Transitorio, entidad que es señalada por haber blindado el nombramiento de Celi, afirmó que la responsable de la actual situación es la Asamblea, pues desde hace dos años no reformó la Contraloría para transformarla en Tribunal de Cuentas, condición que establecieron para que Celi deje de ser Contralor y el país no estaría en la actual situación. Quito.