Jóvenes migrantes fallecen en la frontera
La Mesa Nacional de Movilidad Humana se reunirá en Cuenca el próximo martes.
La irrefrenable ola migratoria de ecuatorianos sin los documentos en regla, por lo general rumbo a los Estados Unidos, sigue cobrando más víctimas. Carlos Calderón, de 20 años, nativo de Paute, murió tras pasar el muro fronterizo aquel país y México, en Texas.
Otro joven, oriundo de Loja, Vicente Lavanda, intentó pasar a por el río Bravo, a cuyas profundidades fue a dar la boya en la que iba junto a otros migrantes. Su familia teme lo peor.
Este martes, 7 de septiembre, la Mesa Nacional de Movilidad Humana, dirigida por el Ministerio de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana (MREMH), se reunirá en Cuenca.
En esta cita se espera la presencia de Mauricio Montalvo, canciller del Ecuador, y de las principales autoridades a nivel nacional relacionadas con la inmigración, emigración y migración.
El objetivo es diseñar mecanismos de concertación entre el Gobierno Nacional, la sociedad civil, la cooperación internacional y la academia, a fin de informar, analizar y articular acciones y aportes en este campo.
Es que Ecuador se ha caracterizado en las últimas décadas por ser un país considerado como emisor, de tránsito, destino, retorno y refugio de grandes flujos de personas de diferentes lugares.
Este encuentro se da en un momento en el que Ecuador registra una ola de salidas de compatriotas en su mayoría a Estados Unidos (EE. UU). También un aumento histórico de muertes y desapariciones en la frontera de ese país con México.
Fallecidos
Y precisamente esto le ocurrió a dos jóvenes migrantes oriundos del Austro del país, que han sido reportados, esta última semana, como fallecidos en dicha zona fronteriza, que en su mayoría es desértica.
Se trata de Carlos Calderón, de 20 años, nativo del cantón Paute, en la provincia de Azuay, quien falleció recientemente tras pasar el muro fronterizo, en Carrizo, Springs, en Texas. Tuvo un quebrando en su salud.
Era estudiante de la Universidad Nacional de Educación (UNAE) y tenía trabajo eventual. Su familia espera la asistencia del Gobierno Nacional para la repatriación del cadáver.
Para el viaje acordó un pago de cerca de 16.000 dólares, y ahora sus allegados han iniciado una colecta en la plataforma gofundme para traer el cuerpo de Calitos, como le decían sus conocidos.
Migrante
Vicente Geovanny Lavanda, de 28 años, oriundo de Loja, igualmente está reportado como desaparecido. El pasado 18 de agosto intentó ingresar a EE. UU., de manera ilegal por el río Bravo.
La boya en la que iba se viró y junto a otras personas cayeron a las profundas aguas de este afluente, que está en Texas. Desde ese día nada se sabe de él, por lo que su familia pide ayuda para localizarlo.
El día del accidente el ecuatoriano vestía un buzo negro, una bermuda azul y unos zapatos de color negro. Llevaba puesto dos rosarios y un anillo de acero. Mide aproximadamente 1.68.
Tiene dos hijos: una niña de cuatro años, y un niño de un año y siete meses. Su familia, que está en Loja, pide que el Estado ayude a localizarlo, pues están desesperados.