¿Qué amigos virtuales tienen sus hijos?
Las redes sociales en los niños y adolescentes hoy en día no son únicamente espacios para relacionarse o comunicarse, conocer gente y subir fotos. Están desempeñando un papel preponderante y tan significativo como el de la propia escuela, en cuanto al desarrollo de la identidad del menor, nos guste o no, a los padres de familia.
Hemos visto con estupor en los últimos días una serie de actividades ilícitas utilizando medios tecnológicos que van desde subastar la dignidad de un menor hasta la afluencia constante de imágenes de índole sexual.
Los medios digitales generan múltiples nuevos contextos, tanto positivos como negativos. Un elemento por considerar es la dificultad que tienen algunos adolescentes para diferenciar el contenido público del privado, no logran o todavía no están en capacidad de acceder a una conciencia que les permita evitar exponerse o verse expuestos a situaciones que en lo inmediato les pueden generar altos niveles de estrés y daños importantes en la visión de sí mismos, con serios riesgos para su salud mental; uno de los más críticos y peligrosos es la actividad conocida como grooming, que se puede explicar cómo la acción deliberada por parte de un adulto para establecer lazos de ‘amistad’ con un niño o niña en internet, con el objetivo de obtener una satisfacción sexual o como preparación para un encuentro sexual. En pocas palabras, es acoso sexual a menores en internet, que incluye desde un acercamiento lleno de empatía, hasta al chantaje más cruento para obtener imágenes comprometidas del menor y, en casos extremos, pretender un encuentro con el menor con fines sexuales.
En el Ecuador lo más cercano como tipificación de estos delitos se encuentra en el artículo 173 del COIP, Código Orgánico Integral Penal, que define el contacto con finalidad sexual con menores de 18 años por medios electrónicos, y que lo sanciona de 1 a 3 años de pena privativa de libertad; sin embargo, no hay mejor arma que la prevención. Algunos puntos para evitarlo sería concienciar a los menores utilizando perfiles privados en las redes sociales; no aceptar en la red social a personas que no hayan visto físicamente y a las que no conozcan bien. Esta es una labor que ineludiblemente le corresponde a padres y docentes.
Sería muy importante que la Asamblea Nacional en conjunto con la administración de justicia incluya nuevas regulaciones, en cuanto al uso de internet y medios electrónicos por los niños y adolescentes, ya no como parte de un cuerpo judicial como el COIP y en el Código de la Niñez y Adolescencia, sino como política de Estado en un nuevo cuerpo legal que disponga sobre la protección integral que el Estado, la sociedad y la familia deben garantizar a todos los niños y adolescentes que viven en el Ecuador; con el fin de lograr su desarrollo integral y el disfrute pleno de sus derechos en un marco de libertad, dignidad y equidad. (O) Erwin Chiluiza Rodríguez, ingeniero de Sistemas, abogado; avenida Samborondón