Destinar el dinero para inversión y servicios
Cuando haya pasado este drama del coronavirus es impostergable que el Estado asuma algunas reformas necesarias para morigerar nuestra situación. La “normalidad” después del coronavirus no puede ser la misma. Muchos hablan de convertirnos en un Estado federal, pero esto es tan complejo y difícil de lograr jurídicamente que nos moriremos y difícilmente seremos un Estado federal. El escandaloso gasto corriente afecta también a los quiteños. Unos más, otros menos, todos somos víctimas del mismo. Propongo acciones concretas: 1.El presidente de la República debe terminar los vigentes contratos de servicios ocasionales, manteniendo únicamente los indispensables, como en el área de salud. La terminación de estos contratos no le costará un solo dólar al Estado ecuatoriano, pues estos no generan estabilidad. Ese personal debe ser apoyado para su reinserción laboral productiva en el ámbito privado. Muchos emprendimientos pueden surgir. 2.- El presidente de la República debe reducir más el tamaño del Estado y bajar el costo anual en empleados públicos al menos en unos tres mil millones de dólares adicionales. 3.- El dinero del IVA y del impuesto a la renta deben quedarse en una proporción razonable en las respectivas ciudades, el saldo debe servir para la solidaridad con las ciudades más pobres, sin perjuicio de que todos debemos cargar con la deuda externa, que urge ser renegociada. 4.- Las instituciones del Estado no deben contratar más personas en relación de dependencia. 5.El Estado central no debe tener la posibilidad de utilizar el dinero de las instituciones públicas que permanece en el Banco Central. Así, el dinero de los afiliados no tiene por qué correr el riesgo de que sea tomado. Como es una obligación constitucional que los dineros públicos estén en el Banco Central, las entidades públicas no tienen alternativa. 6.- Debe eliminarse la tonta prohibición de contratación laboral por horas, del artículo 327 de la Constitución. 7.- Debe restituirse el contrato de trabajo a plazo fijo. 8.- La legislación que expida la Asamblea Nacional debe ser lo más sencilla posible, evitando la creación de órganos y estamentos que en la práctica no sirven.
El Estado central debe tender a replicar el modelo del Municipio de Guayaquil: poco gasto corriente y mucho dinero para inversión y servicios. ¿Por qué nunca se escucha de pobrezas en el Municipio de Guayaquil? Justamente por ello: poco gasto corriente y mucho dinero para servicios e inversión. No es magia. Es solo sentido común. (O)